He de decir que no he tenido ninguna queja en la elección de los proveedores de mi boda salvo por esta tienda, y en qué mala hora.Como un mes antes acudimos a su establecimiento y elegimos dos vestidos nada baratos, por cierto, para mis dos pajes. Las niñas se probaron el vestido y se mandaron para hacerles los arreglos pertinentes. Nos aseguraron que los vestidos estarían a tiempo por lo menos con una semana de antelación, así que yo me quedé tranquila. Pues bien, llegaron un día antes de la boda y grandes, las niñas se colaban por el cuello del vestido. El padre de una de las niñas y la abuela fueron a recogerlo, y ya que iban a hacer un día antes? Pues nada, tocó llevárselos tal cual, el disgusto de ver a mis niñas llorando el día de nuestra boda porque no se sentían a gusto fue mayúsculo, un día perfecto con una mancha gris gracias a ellos. Al regresar de nuestra luna de miel llamé para mostrarles mi disgusto, todo hubiera quedado bien si se hubieran disculpado sin más, pero quisieron escurrir el bulto diciendo que habían tenido problemas personales y que el padre de las niñas y la abuela habían decidido llevárselo cuando se lo probaron. A ver señores.. .dos puntos, siento mucho sus problemas personales pero si son buenos profesionales dejan a alguien encargado del asunto y se aseguran de que todo llega en los tiempos establecidos y correctamente. Segundo punto, claro que el padre decidió llevárselo, ¡qué íbamos a hacer un día antes de la boda? ¿ponernos a buscar otros, o dejárselos para que los arreglaran por la noche? Cualquiera se fiaba, visto lo visto.Tengan cuidado a la hora de una elección tan importante, pues es un día muy especial.

Aparte de las cosas tan bonitas que tiene, cuentas con el apoyo y consejo de su dueña y es puro amor, lo tuve todo a tiempo y todo lo que tiene en la tienda es de autentica calidad, mis niños de arras iban de caramelo.