Desde el principio el trato fue increíble. El vestido me quedó como un guante. Manoli se encargó de coger el bajo y estrechar un poco las mangas y su atención y cariño merecen ser mencionados. El vestido ya lo tenía echado el ojo y ya me lo tenían preparado desde el primer día aunque no era de la colección actual... Todo genial!

Supieron como ayudarme a descartar lo que no me gustaba y buscar un diseño que me definera.
Efectivamente, encontramos un vestido con el que me encontraba cómoda, me favorecía y con unos detalles espectaculares

Consideraba a Rosa Clara una marca premium que brinda productos y servicios de la más alta calidad. Desafortunadamente, ese no fue mi caso; recibí varios disgustos y quede muy insatisfecha con la atención y el servicio.

1. Precio – Incrementaron 3 veces el precio del vestido elegido (de manera sustancial) De €1.796 a €3.490 a €3.999
2.- Citas - Puse mucho énfasis en que una vez acordadas las citas, estás serían inamovibles (viviendo fuera, tendría que compraría un vuelo específicamente para asistir a las pruebas), aun así intentaron cambiarlas.
3.- Diseño - me entregaron un vestido con una falda diferente a la elegida. Para hacer el cambio, pretendían hacer un cobro adicional.

Vivo en Noruega, y me casé en España. Para facilitar las gestiones, decidí escoger un vestido de línea, con un diseñador que yo creía distinguido y formal: Rosa Clara.

En la primer cita me probé varios vestidos, seleccioné 3 opciones con las que me entregaron un presupuesto. Dos días después, volví a la tienda para probarme nuevamente las 3 opciones; me notificaron que había habido un error, que uno de los vestidos no costaba €1.796 sino €3.490.
Me parecía una diferencia monumental, pero el vestido aún se encontraba dentro del rango que buscaba, y comprendí que había sido un error de la dependienta, así que decidí dejarlo pasar.
Envié un correo compartiendo el vestido elegido, el mail incluía foto del vestido, link de la página de internet, y nombre de modelo. Una vez más y para mi disgusto, me comentaron había un error en el precio. El vestido elegido costaba €3.999 (un 55% más sobre el 1er precio y un 12 % más sobre el 2do)
Quise modificar el escote del vestido; debido al error en el precio, la modificación sería gratis. Adicional hicieron un pequeño descuento sobre el precio final. Con todo el estrés que conlleva preparar una boda desde otro país, decidí no pelear, estaba super molesta pero una vez, lo dejé pasar.

El siguiente paso fue definir una fecha para la prueba, solo tendría una, ya que era complicado viajar desde Noruega. Agendé las dos pruebas, 4 y 6 de junio, compre el vuelo para poder asistir (haríamos dos pruebas en una misma semana). Una semana antes de la cita, me comunica una dependienta que el vestido llega el 6 de junio y que por ende, mi cita sería el 8 (yo ya no estaría ese día en Madrid). Esta vez, reaccioné por todas las anteriores, y de manera inmediata me dijeron “vente el 4 que tu vestido sí que llega”. Me dejó tan mala sensación…. Parecía que cambiaban la cita solo por pereza de atender, no porque realmente el vestido no estuviera listo.
Finalmente, en la primer prueba, me entregan un vestido con falda de tul lisa pero, el vestido que yo había elegido incluía una falda de tul plumetti. Me comunicaron que tendría que pagar 1000 más si quería la falda plumetti. Me enfurecí, no estaba dispuesta a pagar un euro más, les mostré el mail a través del cual compartí mi elección el cual incluía foto, y link del vestido. Fue entonces cuando aceptaron hacerme el cambio sin costo, esto tenía consecuencias. Tendríamos que hacer ajustes pocos días antes de la boda aún.

En vez de poder disfrutar el proceso, lo sufrí, fue una pesadilla. Las pruebas y entregas del vestido fueron bastante incómodas, escuche a la gente del taller hablando de mí y mi caracter mientras esperaba.

Perfilaron el vestido tal y como yo quería. Quedé increíblemente bonito. Recomiendo 100% este proveedor, no hay palabras.

Elegí mi vestido en Rosa Clará, porque me encantaban sus vestidos. Siempre los miraba cuando salían nuevas colecciones. Por lo que fue la primera tienda a la que fui. Me encantó uno de los vestidos. Sí que es verdad que me gustaban las mangas de otro y me las hicieron para el diseño que yo había elegido, lo cual hizo de mi vestido lo que yo quería. Fue lo que más me gustó.

Encargué mi vestido de novia y luego por la pandemia tuve que posponer la boda. Me lo guardaron un año y medio y me hicieron varias pruebas para ajustármelo. Pude hacerle algunos añadidos al modelo original para ponerlo a mi gusto. Todo salió bien. Gran experiencia y profesionalidad, sobre todo con las chicas del taller.

El pasado 10 de julio celebré mi boda y no pude ir más guapa gracias a uno de vuestros maravillosos vestidos. Ahora, después de toda la celebración y la luna de miel, solo me queda cerrar esta etapa agradeciendo a la firma y a todo el superequipo que hay detrás por el trabajo realizado. Desde la primera toma de contacto en Velázquez, 58, con la simpatía y cercanía de Bea, la rapidez y amabilidad de quién estaba tras la conversación vía telefónica y WhatsApp, y sobre todo, la profesionalidad de Encarni en el atelier, me sentí genial. Desde el primer momento tuvo paciencia, sinceridad, predisposición, y sobre todo, profesionalidad, lo cual como novia me transmitió seguridad en que iba a conseguir un resultado ideal (y así fue). ¡Una vez más gracias, porque entre todos conseguís hacer magia!

En la elección del vestido todo bien. Mi asesora (Bea), una chica muy agradable que te probaba todo las veces necesarias. No fue necesario dar muchas vueltas porque el vestido "me eligió" pronto. Por otra parte, en la tienda el trato siempre correcto y agradable, salvo algún error en las citas, y de agradecer es el trato que recibí con el aplazamiento, ante el cual me lo guardaron sin problema hasta mi día. Destacar y dar las gracias a la directora que se encargó de contactar con la tienda de Cáceres para que me guardaran el vestido una semana entera porque tenía que irme allí una semana antes, y todo bien, llegó perfecto. En cuanto al vestido, poco a destacar, todos los de la marca son bonitos y de calidad. Particularmente, el mío era espectacular y me lo ajustaron para que me quedase perfecto. En un año y medio no dudé de que era mi vestido ni un solo día.

Sin duda, los diseños de Rosa Clara creo que son de los más elegantes de novia, pero el precio con respecto al servicio que te ofrecen creo que es bastante excesivo. Cuando me lo compré sentí que estaba en una tienda normal, no nos trataron con el cariño que creo que deberían tratar a una persona que va a gastarse seguramente más de 2.000€. Pedí como extra una sobrefalda de tul y no fueron nada flexibles, solamente tenían un modelo y aunque quería la mitad del tul, tuve que pedirla entera y luego cortar la mitad del tul. El arreglo del vestido me lo hicieron muy bien (muchas gracias Encarni por tu trato, eres lo mejor de Rosa Clara), pero el día de la entrega hubo muchos fallos porque creo que estaban hasta arriba y no prestaron la atención que se merece cada vestido: había una parte de la falda que tenía los bordados sin coser y tuvimos que estar toda la tarde cosiéndolos, y nos la entregaron casi sin planchar.

Elegir Rosa Clará para comprar mi vestido de novia fue lo mejor que hice. Yo iba con una idea del vestido que quería y tras probarme varios de los que pensaba que eran mi estilo, Sabela, que fue quien me atendió, me probó uno completamente distinto, y fue el que finalmente elegí. Sabela, además de ser una persona amable, superprofesional y sincera, cosa que agradezco, supo captar desde el primer momento qué estilo me favorecía más. También tengo que hacer mención especial a las chicas del taller. En la primera prueba, me atendió María, que es pura dulzura aparte de trabajadora y profesional y me dio mucha confianza. Y en la segunda prueba, nos atendió Encarni, la jefa del taller, y con quien también terminé encantada porque fue muy cercana, empática, entrañable, toda amabilidad y, además, se nota de sobra su gran experiencia. Hizo que me sintiese segura a la hora de llevar el vestido aparte de darme muchos consejos bastante útiles. Es por todo ello que recomiendo Rosa Clará, 58 y el taller de Rosa Clará 100%.

Me compré un vestido de novia en mayo porque me caso en octubre. Estoy muy contenta con la calidad del vestido y con Encarni (taller) ya que ha sabido entender mis dudas y todos los detalles que no me gustaban me los solucionó, además su actitud me transmitió seguridad de su trabajo y que el vestido iba a estar perfecto para el día de recogerlo. Lo que no me gustó de la tienda es la atención de la señora F., le falta empatía con el cliente y no me gustó cómo se dirigió a la chica que me estaba ayudando en el probador. Incluso recuerdo que muy amable la asesora me dijo "te podemos poner más detalle en el escote lo que tú quieras". Y esta señora F. le dijo se lo vas a poner tú.

No tengo palabras para describir la profesionalidad de Cristina. Yo tenía una idea muy clara de lo que quería y busqué por muchos sitio y modistas y ninguno daba con la idea que yo les quería transmitir menos ella. Me probé tres vestidos, y uno de ellos era lo que yo buscaba pero con algunos cambios, y ella hizo todo lo que podía y más para darme mi vestido deseado. Puso todas sus ganas y paciencia y lo conseguimos. Sin duda les recomiendo.

Desde el principio quedé muy contenta con la persona que me atendió, Eva, ya que tuve la sensación de que entendía perfectamente lo que quería, y eso que no creo yo que fuera muy fácil, ya que cogí un modelo y le cambie varias cosas. Trato cordial en todo momento y muy buena disposición para hacer cualquier alteración necesaria incluso a última hora. Casándome un sábado fui el lunes anterior, y al hacer un par de comentarios de cosas que no nos convencían me volvió a dar cita para el miércoles.
Quedé muy contenta con el vestido, un encaje precioso y muy fino, y todo el mundo me comentó que era el vestido perfecto para mi, y gran parte de esto se debe a la flexibilidad por parte de Eva de hacer todas las modificaciones que pedimos, y crear justo el vestido que tenía en mente. Cabe también decir que Eva tuvo mucho presión, ya que a cada prueba fui acompañada de un consorte de familia: mi madre, hermana, madrina, abuela y tía. Imaginad a 5 mujeres haciendo comentarios para conseguir que en sus ojos, yo fuera la novia más guapa del mundo.

Por eso recomiendo RC, pero sobre todo recomiendo a Eva.

¡Un vestido espectacular! Esa fue la expresión de todo el mundo cuando lo vio. Yo estoy contentísima de haberme comprado allí el vestido ya que quedó muy bonito. El trato personal fue muy bueno en todo momento.

Tienen vestidos espectaculares con diseños elegantes y muy finos. La atención es buenísima y hay que dejarse guiar por ellas a la hora de elegir tú vestido de novia porque se nota el estilo y la experiencia que tienen. Me encanta y estoy súper contenta de haberme comprado el vestido en esta firma. No os fieis de lo que se comenta por ahí que es carísimo porque hay precios muy variados, depende de que vestido escojas.