El traje de mis sueños. El primero que me probé y el que escogí finalmente fue de Rosa Clará. La atención de las chicas inmejorable, me hicieron sentir como una reina en todo momento.

Sin duda, el vestido ideal. Si me volviera a casar lo haría de nuevo con este vestido.

El vestido precioso, el trato estupendo, y la costurera un genio. Con el cambio de fecha, todo flexibilidad, ni una sola pega y, por supuesto, me guardaron el vestido sin problema durante todos los meses de espera.

En Rosa Clará (A Coruña) son muy profesionales y atentas. Prestan atención a cada detalle y ponen todo su empeño para que todo salga bien. Estoy especialmente satisfecha con el trato de Lorena, desde la primera prueba ha tratado de dar con mi vestido, siendo muy cariñosa en cada paso. 100% recomendable.

La primera vez que visité la tienda iba un poco con las expectativas bajas. ¡40 minutos después, tenía vestido! La atención de Lorena y Sara, las chicas que nos atendieron, fue increíble. Nos lo hicieron todo muy fácil. Por no hablar de la costurera, un amor que ha conseguido dejar mi vestido perfecto para el día más increíble. Ha sido un año complicado y la primera prueba se retrasó unos meses. Cada día era un suplicio y no sabíamos si podría celebrarse todo. Al final, el 28 de agosto fui a buscar mi vestido y todo ha salido genial. Volvería a comprar en este lugar con los ojos cerrados.

¡Desde la primera visita me hicieron sentir como en casa! Tenia las ideas muy claras y no me costó nada escoger mi vestido.
¡Y a partir de ahí fue superfacil! ¡Se amoldan a todo lo que necesitas, la modista es maravillosa! ¡Te aconseja en todo y lo hace genial!
¡Escogeria Rosa Clará mil veces mas!

El día que fui a probarme y escoger el vestido fue fantástico. Me acompañaron y madre y mi prima, la chica que nos atendió fue muy agradable, tuvo siempre en cuenta lo que quería y estuvo muy atenta a mis opiniones y a cómo me encontraba para traerme los vestidos. Encontré mi vestido ese día y apenas me probé 5 o 6, ¡acertó de pleno! Después, todo el proceso fue muy fácil y cómodo, son muy amables, intentan adaptarse a tus horarios y darte todas las facilidades.
El día antes de la boda fui a recoger el vestido, al llegar a casa me di cuenta de que el cancán no era el mío, llamé a la tienda y me dieron todas las facilidades para subsanar el error y que fuera a recoger el mío. Además tuvieron el detalle de regalarme la limpieza del vestido por las molestias que hubo con la confusión del cancán.
La verdad es que recomiendo ir porque el trato es fantástico, tienen vestidos preciosos y te garantizan exclusividad de vestido para ese día, ¡sabes que solo tú vas a casarte con ese vestido ese día!

Lorena se portó de 10 conmigo y mi madre. Nos aconsejó desde el primer momento y la atención que nos brindó fue excelente. Nunca me arrepentiré de haberme puesto en sus manos para esta ocasión tan especial.

Muchísimas gracias a todas por prepararme ese maravilloso vestido y ese maravilloso velo y por aconsejarme sinceramente en todo momento. Gracias por el buen trato que habéis tenido en todo momento.

Encantada con el trato recibido desde el minuto uno. Gracias a Lorena, la dependienta, porque supo ver lo que realmente necesitaba y solo fue necesario probarme un vestido para saber que sería el mío. Tanto ella como la modista estuvieron muy atentas en todas las pruebas. El vestido viajó de A Coruña a Bilbao y no hubo ningún problema. Me lo entregaron perfectamente planchado el día antes de la boda.

Trato inmejorable de todo el equipo, en especial de Fina. Me ayudó en todo momento, tanto en la elección del vestido como en todo el proceso. Siempre atenta y cariñosa. Allí encontré el vestido ideal después de mucho buscar. Volvería a repetir con ellas, sin duda. Gracias.

Compré mi vestido en Rosa Clará, en Santiago. Me atendieron de maravilla. Fui dos veces a probar vestidos antes de elegir el mío y me trataron muy bien. En las pruebas, genial, ¡y el vestido perfecto! Recomendable 100x100.

¡Me quedé enamorada de mi vestido de Rosa Clará! ¡Y mi ahora marido creo que también! A todo el mundo le encantó el vestido. La profesionalidad, experiencia, naturalidad y amabilidad del personal de la tienda de a Coruña me hizo sentir cómoda y segura en todo momento. ¡Un abrazo para ellas! ¡Confiad en sus consejos! ¡Un saludo! May.

Yo quedé encantada, desde el minuto 1 que entré por la puerta y me atendió Lorena hasta que salí llevándome el vestido. Había ido antes a ver otras tiendas y me había tratado en alguna mejor que en otra, pero Lorena supo conectar conmigo desde el primer momento.

La verdad es que para mí buscar el vestido no fue fácil porque no tenía claro lo que quería y además soy bastante indecisa. Y si hay algo que odio es que me presionen y en todas las tiendas que había visitado me sentí presionada en mayor o menor medida, pero aquí no me transmitieron ningún tipo de presión y me dieron siempre mucha confianza, lo que hizo que pudiera relajarme y disfrutar más de las pruebas y finalmente me enamoré del que fue mi vestido.

Tampoco me pusieron ningún problema por hacerme fotos con los vestidos y había total transparencia en cuanto a los precios porque los ves desde el primer momento en el catálogo, algo que no encontré en alguna otra tienda, donde me dio apuro preguntar los precios del catálogo, así que me probé los vestidos sin saber cuánto costaban y eso es algo que genera cierta tensión y al final de la prueba tampoco quisieron decirme los precios de todos, sólo de los que más me habían gustado, en fin.

Pero en la tienda de Rosa Clará en A Coruña encontré naturalidad en todo momento, antes y después de elegir mi vestido, las pruebas definitivas con la modista también fueron bastante bien y el trato inmejorable, súper amables, respondiendo a todas mis dudas y adaptándose en todo momento a mis necesidades.

Gracias por hacer que la experiencia de comprarme el vestido de novia haya sido más fácil.

La verdad es que yo no tengo ninguna queja con Rosa Clará Coruña; desde que pedí la primera cita, me atendieron muy bien, y me probaron los vestidos una y otra vez, incluso volví otro día sin prueba para ver si me podía probar el que finalmente sería mi vestido, para ver que opinaba mi madre.
En las pruebas estuvieron muy atentas y haciendo todo lo posible para que me fuese convencida; me aconsejaron sobre las medias, de como colocar lo que había comprado para el pelo. Todo genial, la verdad.