Mara es una gran profesional. Capta la idea que buscas en la primera reunión. Tiene muchísimas telas y no vas a saber cuál elegir. La volvería a elegir sin dudarlo.

Te hacen tan fácil la selección, enseguida te ayudan a conseguir lo que siempre habías soñado! Su estilo es único y su trato excelente!
Gracias por todo lo feliz que nos hicisteis!

Todo lo que diga acerca de esta maravillosa marca y de su personal es poco. Mi traje me lo hicieron en el atelier de Sevilla, y desde el primer momento en el que entramos hasta el último día en que salimos con el traje y zapatos en mano, todo fue rodando y un trato que en pocas tiendas se encuentra. Gracia, siempre atenta a todo lo que la novia y la familia necesiten. En mi caso, que venía del extranjero, siempre se acomodó a mis horarios sin ningún tipo de queja y siempre respondiendo a todos los e-mails que les enviaba con mis muchas dudas. Rosi, la costurera que realizó mi traje, tiene unas manos de ángel. Me hizo el vestido que yo quería exactamente, incluso cuando el diseño de mi vestido era algo que ellos no habían hecho con anterioridad. Me sentí comodísima durante el día de la boda con mi traje y mis zapatos, no me molestaban por ningún lado. Llevaba la espalda al aire y en ningún momento los hombros se resbalaron. No me pesaba (a pesar de los metros de tela que llevaba encima) e incluso idearon un cinturón de tul como la falda para que me pudiera recoger los metros de cola para el baile. Me sentí como una princesita en todo momento, y todo el mundo me felicitó por la maravilla de traje. Y con respecto a los tacones, solo decir que aguanté con ellos desde las 12am hasta las 11pm, y tengo problemas de espalda. Son los tacones más cómodos que nunca había tenido, y no solo hablo por mí, sino por mi hermana, también, que llevaba unos zapatos de Polnúñez. Muchas gracias por todo, Polnúñez. ¡Volvería a repetir mil veces más!

Increíble el trato recibido y la atención, Mara no pudo ser más cariñosa y estar siempre fijándose en todos los pequeños detalles para que todo quedase perfecto.
Fijaros si me gustó que el año siguiente mi madre se hizo el traje de madrina y ahí es cuando ya nos ganaron al 200%.

Fui a ver vestidos de novia a varias tiendas, sólo entrar en Pol Nuñez sabía que ya había encontrado mi sitio ideal... Mi vestido de novia quedó tal y como lo pedí... ¡Espectacular! Gracias a Mara y a Gracia. Un beso.

Mi peor pesadilla. Fue de lo primero que elegí para mi boda: los zapatos. Los vi, me gustaron y los encargué en noviembre y no los recibí correctamente hasta 4 días antes de la boda (principios de mayo). Tenía el vestido pendiente de terminar 4 días antes de la boda solo por el bajo, ya que no habían llegado los zapatos. Me los fabricaron dos veces mal: una muy muy bajos y otra muy muy altos (cuando seleccioné la altura con un zapato que tenían en la tienda). Además del estrés que me supuso y el quebradero de cabeza, la primera vez que los recibí más bajos de como los había pedido y les comenté que esa no era la altura que había pedido, me dijeron que tenía que pagar 40 euros por el cambio de tacón (cuando no era un error mío, sino suyo y cuando sé perfectamente, porque he trabajado en el sector, que no me iban a cambiar el tacón, sino que fabricarían el zapato de nuevo dada la horma y que ese es el coste de fabricación del zapato). Resumen: la primera vez que me llegaron bajos pague los 270 euros más los 40 que me cobraron por “cambiar el tacón” (como si fuera que era mi culpa) por pasar página. Cuando la segunda vez me llegaron mucho más altos no daba crédito (¡me había probado un zapato de la altura que quería en la tienda el día que los encargué!). Para más inri, todo el tiempo estuvieron a la defensiva conmigo. Además, no tienen muestras de todas las tallas (me la jugué a pedirme el 38,5 sin probármelo, que gracias a dios fue mi talla) y su horario es muy reducido y al ser de otra ciudad tampoco me ponían facilidades. Evidentemente no volvería a comprar nada allí, ni lo recomendaría a nadie que lo hiciera.

No quería ser una novia más, ni seguir modas. Quería ser yo, quería que dentro de muchos años, cuando me vea, me vuelva a enamorar del traje. Fue un acierto contar con las manos de oro de Mara y la ayuda y asesoramiento de Gracia. Personas increíbles que me ayudaron a conseguir mi sueño e ir como siempre había deseado. Mil gracias. Sois fantásticas, 200% recomendable.

Lógicamente, el traje de novia no es cosa mía, pero solo con ver a mi ya esposa tan guapa y radiante, bien merece la pena. Lo bueno hay que pagarlo, claro, pero eso no significa que sea caro. Ni una queja en absoluto.

Recomiendo esta marca a todas aquellas personas que busquen un vestido del estilo y corte romántico que sigue Pol Núñez. A mi me encantaban todos, aunque finalmente creamos el que reunía una mezcla de varios y quedé maravillada.

Me hicieron un vestido precioso, original y con tejidos de una gran calidad. No son baratos, pero la calidad hay que pagarla. Me decidí por el primer vestido que me ofrecieron; dieron en el clavo en el primer momento. Estoy encantada con Pol Núñez. Os lo recomiendo.

Tenia claro que mi vestido de novia sería de Pol Núñez, ya que cada vez que ojeaba revistas los vestidos que más me gustaban eran los suyos. ¡El resultado fue espectacular! Hoy, dos años después sigo contentísima con mi vestido, me encanta. A mi madre también la vistió Pol Núñez y está tan contenta como yo. De hecho, este año se casa mi hermano y hemos vuelto a ponernos en sus manos. ¡Un equipo de 10!

Hace tres años que me casé, y sigo teniendo muy buen recuerdo del trato recibido en Pol Núñez. El asesoramiento recibido, y la idea final del traje, coincidieron perfectamente con todo lo que había soñado para ese día tan especial.

Te atienden estupendamente, son muy amables, y te dan muchas ideas. Me encanta su estilo y te solucionan cualquier problema sobre la marcha. ¡Me encanta mi vestido, muchísimas gracias!

Porque es una tienda donde te reciben con respeto y educación, atienden a tus peticiones todo en un ambiente muy familiar y sin presiones de ningún tipo. Son grandes profesionales tanto las diseñadoras como las costureras.

Me encanta el estilo y la delicadeza de sus trajes de novia, te hacen sentir única. El trato es exquisito, muy profesional y aciertan en las recomendaciones personales que hacen. Repetiría mi experiencia con Pol Núñez.