He estudiado en la escuela de pasteleria Hofmann aprendiendo las técnicas esenciales de la pastelería. Seguidamente estuve de encargada de partida de fríos y postres en un restaurante de la zona llamado La Sal. Después de un año, me trasladé a Gerona, al Celler de Can Roca. Concretamente en Rocambolesc, en el cual aprendí todas las técnicas para la elaboración de heladería artesanal y producción de pastelería. Un año después, volví a mi localidad, donde trabajé para Espai Gastronomia de pastelera y heladera, una empresa compuesta por Can Alzina, Can Macia y El Castell de Tous.

Después de todo este aprendizaje en empresas tan distintas, decidí junto a mi primo Isaac, también socio de la empresa, crear este nuevo concepto en la zona de obrador de pastelería visto al público. En el cual, elaboramos tartas para bodas, personalizadas y pastelería moderna para todo tipo de público.

Me inicié en el mundo de la pastelería por pura casualidad, coincidiendo con mi prima Eva Palomo en un restaurante de mi localidad llamado La Sal, como encargado de partida de la pastelería y los fríos. Aun así, llevaba muchos años en el mundo de la hostelería ya que mis padres siempre han estado conectados a este sector.

Después decidimos abrir este nuevo concepto de obrador de pastelería a la vista, creando un original proyecto que hasta el momento no se había visto en Igualada.

Junto a todo esto, y en el proceso de creación de la pastelería me especialicé en tartas modernas por la escuela de pastelería Hofmann y me saqué la titulación para poder crear mis propias figuras de chocolate por la escuela Chocovic.