Sin duda, no hemos podido escoger mejor el sitio. Susana es un encanto y te ayuda con todo lo que necesites para el gran día. Salió todo como lo deseábamos. La comida no puede estar más rica; el lugar, de ensueño, con esas vistas al mar y a las Cíes. La atención del personal es de 10. Resaltó la profesionalidad del maître, Quique. El DJ es genial y no puede animar más la fiesta. Sin duda, muy muy recomendable. Gracias por hacer que nuestro día fuera de 10. Lo volveríamos a repetir 1000 veces. ¡Gracias y mil gracias!

Muy amables y atentos afrontando la situación y tener que mover la fecha, con unos precios inmejorables para todo lo que ofrecen.

La comida es excelente y la relación calidad precio es buena. Lo recomiendo. Gracias a ellos el día fue único.

Lugar en el que todo te lo ponen fácil. Sigo alucinada con la atención de todos los profesionales y en especial de Susana, que, como digo, hace que un día aparentemente complicado sea fácil. ¡El Dj un 10, también! ¡Y la comida buenísima! Con las mejores vistas que se podría tener.

Cualquier cosa que pueda decir del Restaurante Rocamar se queda corta. Desde el primer día que fuimos a pedir presupuesto y nos atendió Susana supimos que este restaurante sería el elegido para celebrar nuestra boda soñada. Es una gran profesional del tema bodas y cuenta con un equipo maravilloso de cocineros y servicio de mesa. Desde el primer momento todo fueron facilidades para organizar nuestra boda con ellos. Nos daban ideas geniales y no ponían ninguna pega a las que dábamos nosotros. Además, son grandes personas, les estaré eternamente agradecida porque hicieron lo imposible por montarnos el cóctel en el jardín a pesar de que había diluviado toda la mañana y mediodía. Montaron el plan B, pero mientras yo salía para la iglesia desde mi hotel, milagrosamente con un sol radiante asomando entre las nubes que ya no se fue hasta que estuvimos dentro cenando. Ellos hicieron el cambio del plan B al A totalmente a contrarreloj, pero con un resultado perfecto. Para nosotros era muy importante celebrar esa parte de la boda fuera e hicieron lo imposible por conseguirlo y lo consiguieron. Y respecto al tema comida, impresionante. Todos los invitados alucinaban: bandejas de percebes, cigalas, langostinos, vieiras... Pasaban y pasaban sin parar, y lo que más destacaba todo el mundo era la frescura y calidad de la materia prima y el punto perfecto del cocinado. Y la carne (solomillo) un espectáculo, estaba riquísima de verdad. El postre gustó también muchísimo, tarta guanaja de El Molino, con quienes trabajan para el postre, lo que es garantía de éxito. Sin duda, si buscáis relación calidad precio total, un trato inmejorable, un servicio de diez y que los invitados se vayan pensando que han estado en la boda en la que mejor han comido en su vida, el Restaurante Rocamar es vuestro restaurante. Ah, y me olvidaba de comentar las vistas impresionantes del mar abierto y las Islas Cíes, ya que se encuentra encima de rocas contra las que chocan las olas y es precioso, de hecho mi ya marido y yo nos escapamos media horita con el fotógrafo a hacernos unas fotos al atardecer. Por todo lo que os he comentado y mil cosas que me dejo en el tintero recomiendo el Restaurante Rocamar para conseguir vivir vuestra boda soñada.

Sin palabras, estamos sin palabras, fue increíble, la comida perfecta no lo siguiente y no hablemos de la atención por parte de todos los trabajadores, fue una verdadera maravilla. Repetiría un millón de veces, son increíbles, los recomiendo al 110%, les doy las gracias por hacer de un gran día un día totalmente increíble. Mil y mil veces más gracias.

No podía haber elegido mejor lugar para celebrar nuestra boda. En todo momento cumplieron todas nuestras expectativas y se han desvivido por hacernos sentir especiales en nuestro día. Lo recomendamos totalmente, ha sido una boda tan fantástica que nos estamos planteando hacer una reboda más íntima.

Llevábamos visitado varios proveedores y no nos dábamos decidido. Fue caer allí y salir los 2 con la seguridad de que nuestro banquete sería allí. El trato de Susana fue excelente desde el primer momento, nos aconsejó muy bien y fue muy flexible con nosotros para reunirnos, debido al poco tiempo del que disponemos por nuestro trabajo, es una gran profesional. El banquete fue un éxito, nuestros invitados se lo pasaron muy bien. Sin duda, repetiríamos.

Celebramos nuestra boda el pasado 30 de abril, y no podemos más que agradecer al restaurante Rocamar su gran hacer y su profesionalidad. Hace que las cosas sean fáciles y que tú y los invitados disfrutéis del día. Comida y trato excelente. Sin duda, si tuviese que organizar un evento, lo volvería a elegir. Un 10.

No tengo palabras para describir la profesionalidad con la que hicieron todo: la decoración que estaba de su mano estaba perfecta. El servicio fue perfecto en todo momento, estuvieron muy atentos en todo tanto antes, durante, como después de la celebración, y lo más importante, cada plato estaba tal cual como en la prueba del menú que hicimos anteriormente, que fue excelente. Podrías entender que no es lo mismo cocinar y servir una mesa de 6 personas que un salón con 150, y que hubiese algún fallo, pero en este caso salió todo perfecto.
Recomiendo a cualquier pareja que se vaya a casar por la zona que contrate sus servicios, porque yo lo volvería a hacer, sabiendo cómo salió todo, si me casara este año. Fue la primera boda en la que comí allí, y estoy deseando que se case mi hermana porque sé que repetiré.
Nosotros personalmente no vimos otros restaurantes, los dos teníamos muy claro que sería allí, pero otros amigos que se casaron el mismo año nos comentaron que el precio era similar al de otros restaurantes que visitaron, y personalmente, de 4 bodas que tuve en 2015, sólo puedo equiparar la calidad del producto a una de las que asistí, las demás no tienen punto de comparación. Y esta otra boda no fue en la misma zona.

Hemos celebrado nuestra boda en Rocamar, ya teníamos pensado hacerlo ahí desde siempre, pero sin duda fue lo mejor que pudimos haber hecho. Todo fue perfecto, el trato tanto con Susana como con todo el personal, son increíbles, hacen que todo salga perfecto.
Proyectamos un vídeo antes del banquete y ellos se encargaron de ponerlo para no tener que hacerlo yo. Nos dieron todas las facilidades para que todo saliese perfecto, el marisco un lujo, las cigalas eran enormes, los percebes, langosta, buey... ¡todo de lujo!
Los invitados al finalizar el banquete nos vinieron a felicitar por lo buena que había sido la boda, y qué decir de las vistas, sin palabras. Sin duda lo recomiendo a quien quiera que su día sea perfecto: Rocamar, para nosotros lo fue. Al día siguiente hicimos la reboda y otro tanto de lo mismo, todo perfecto no, lo siguiente.

No puedo estar más contenta con el servicio, la calidad de todo el producto, el lugar... todo, absolutamente todo perfecto. Si algo ha sido determinante para que el día saliera realmente perfecto ha sido que escogimos no bien, ¡lo siguiente! Realmente magnífico.

Poco se puede decir ya, de este restaurante con tanta trayectoria, ¡pero todo lo que os digan es poco! ¡Esas vistas son impagables! La calidad-precio única. Muchos otros aprovecharían con ese renombre que tienen y esas vistas hacer negocio, ¡pero ellos no!, y eso dice mucho de ellos. Calidad y trato inmejorable.

Rocamar fue genial, no nos arrepentimos para nada de hacerla allí. La atención tanto de Susana siempre como de los camareros en el día fue perfecto. Precio para todos los bolsillos.Comida deliciosa, y es un sitio muy bonito también, aunque no tenga muchísimo jardín como en los pazos es un espacio perfecto y no es necesario más.

Nosotros comenzamos nuestra aventura de casarnos pensando en ir a un pazo (o algo por el estilo). A día de hoy, ya casados, no podemos hacer otra cosa mas que alegrarnos de habernos cruzado con la gente de Rocamar en una feria de bodas. Desde el primer momento todo han sido facilidades e incluso en los momentos mas duros han estado ahí dándonos apoyo. Recomendamos casarse en Rocamar con los ojos cerrados porque para nosotros fue la boda perfecta gracias a ellos, los invitados contentísimos, unas vistas espectaculares, una comida deliciosa y una fiesta sublime.