Celebrad vuestra boda en una lujosa y exquisita masía que solo respira aires de grandilocuencia y suntuosidad. Si con vuestro amor ya habéis rozado el cielo, en el Huerto de Santa María conquistaréis el mismísimo paraíso.

Espacios y capacidades

Hay tantos lugares como sueños hechos realidad. Y la fantasía puede ser infinita.

Conmemorad la ceremonia nupcial en un majestuoso invernadero totalmente acristalado que envolverá el encuentro en un aura de luz. Y para el aperitivo o el completo del banquete escoged cualquiera de los maravillosos espacios diseñados como auténticas joyas de arte:

Salón Almudín

El Almudín es un lugar abierto a los jardines del complejo. Sus estilizados ventanales permiten contemplar la vegetación de plantas aromáticas mediterráneas desde cualquier punto. Sorprende en este espacio multifunción – que dispone de cocina propia- su techumbre de madera y hierro, lo que le convierte en un sitio acogedor y hogareño.

Plaza Mayor

Es el espacio más polivalente y, sin duda, el distintivo del Huerto de Santa Maria. Utilizado para consagrar todos los perfiles de boda dada su gran versatilidad, tiene una cubierta móvil que permanece oculta y, una vez desplegada, garantiza que la celebración discurra sin contratiempos.

La plaza mayor es un espacio dinámico que no por ello pierde ni un ápice de elegancia, y además cuenta con una cocina propia ubicada en un edificio de emblemática arquitectura.

Los Arcos

Es un lugar muy personal, idóneo para el festejo de los aperitivos. Ubicado en una posición que le concede gozar de privilegiadas vistas sobre el jardín, desde Los Arcos se vive a ras de suelo, confundiéndose sus límites con la naturaleza que se posa a sus pies.

La Pérgola

Al final de los Arcos se alza la Pérgola, un espacio diáfano diseñado para vivir al aire libre las celebraciones más personales y saborear distendidamente los aperitivos.

A la sombra de las plantas trepadoras, y rodeada de belleza natural, su ubicación regala una excelente perspectiva de los jardines y los edificios del complejo.

Sala Alcazaba

La Alcazaba tiene reminiscencias de la tradición árabe que la convirtió en fortaleza; desde la puerta de acceso, chapada en bronce, hasta cada mínimo ornamental confieren a este lugar una personalidad única e intransferible.

Edificio contiguo a la torre que se eleva como colofón del complejo rural. Desde su interior se pueden contemplar unas magnificas visitas de los jardines de El Huerto.

La Font Blanca

Se trata de un espacio casi independiente al resto, con capacidad de ofrecer el mejor servicio para un máximo de 300 personas.

Entre paredes de piedra y el arrullo del agua que serpentea entre ellas, Font Blanca cumple las expectativas de aquellos clientes que buscan exclusividad, privacidad y gran capacidad.

Los jardines

Dominado por una extensa pradera, el jardín impresiona al invitado primerizo, quien instantáneamente piensa que la naturaleza ha invadido la ciudad.

Con el predominio de las especies mediterráneas, los árboles y palmeras, las plantas acuáticas y los arbustos, transmiten aromas, colores y formas que impregnan de sosiego el espíritu del visitante.

Otras instalaciones y servicios

Sala Mirador

Sala diseñada y adaptada tecnológicamente para la celebración de reuniones de trabajo, exposiciones, presentaciones, conferencias de prensa y cualquier evento relacionado con el mundo de la empresa.

Arrozería

En el entorno de El Huerto de Santa María existe un espacio gastronómico donde degustar el placer del mejor arroz. La tranquilidad y naturalidad del ambiente, la importancia del detalle, la impronta de la vanguardia y el peso de la tradición, junto con los arroces de siempre y de ahora, las carnes y pescados más selectos, la pasión por los sofisticados vinos…Todo se conjuga a la perfección para dotar de excepcionalidad y gusto este rico espacio.

Barracas

Este sitio recrea la vida en la huerta valenciana y supone al mismo tiempo un homenaje a las edificaciones valencianas más universales.

Las Barracas es simplemente un espacio diferente, tanto en su concepción como en su construcción, pero mantiene el mismo deseo de ofertar a los visitantes de El Huerto lo mejor en gastronomía, arquitectura y entorno natural.