Luna de miel en Rusia
Rusia es uno de esos países que no puedes dejar de visitar. Se trata del país más extenso del mundo que fusiona a la perfección Europa y Oriente.
Información sobre Rusia
Rusia es el país más grande del mundo, con una superficie de más de 17 mil kilómetros, lo que supone una novena parte de la tierra firme de nuestro planeta. Ocupa todo el norte de Asia y el 40% de Europa, y ostenta el record de ser el país que limita con más países, ni más ni menos que 16.
Si estáis pensando en visitar este fabuloso país en vuestra luna de miel, aquí tenéis 2 destinos que seguro que os cautivarán:
San Petersburgo. Situada en el golfo de Finlandia esta ciudad fue creada por el Zar Pedro el Grande para que se convirtiera en la ventana de Rusia en Europa. Se trata de una de las ciudades más grandes del mundo, y la segunda de Rusia. Se la conoce como la Venecia del Norte debido a sus románticos canales, sus majestuosas iglesias y palacios, y sus fabulosos parques. Uno de sus principales atractivos son las noches blancas, un fenómeno que ocurre durante el solsticio de verano en el que el crepúsculo da paso al amanecer sin llegar a oscurecer en toda la noche. En esta ciudad no podéis dejar de visitar la Catedral de San Isaac y la de la Virgen de Kazán, el Palacio de invierno y la Fortaleza de Pedro y Pablo, famosa por su impresionante Catedral, que es el panteón de los zares rusos. Tampoco os perdáis el Museo Hermitage, uno de los más grandes del mundo, ni el palacio Ekateriinski, con su espectacular Cámara de Ámbar.
Moscú es la capital más grande del mundo. Lo que más atrae de esta ciudad es la majestuosidad de sus edificios, y las espectaculares cúpulas doradas que la salpican. En Rusia todo es grande, por eso la plaza más grande del mundo no podía estar en otro sitio que no fuera Moscú, se trata de la famosa Plaza Roja, en la que podréis visitar el mausoleo de Lenin, el Museo Estatal de Historia y la famosa catedral de San Basilio con sus características y pintorescas cúpulas, construida en el siglo XVI por Iván el Terrible. En el centro de la ciudad encontraréis el Kremlin, la antigua fortaleza de los Zares donde podréis visitar la catedral de la Asunción, la de San Miguel Arcángel, el Zar de los cañones y la Campana de la Zarina. Tampoco podéis dejar de visitar el Gran Teatro Bolshoi, sede de grandes óperas y de su famoso ballet. Y si hay una experiencia que no os podéis perder es la de bajar al metro, conocido como el Palacio Subterráneo se compone de 165 estaciones que lo convierten en un auténtico museo lleno de esculturas, grabados, mármoles y otras maravillas.
En cuanto al clima, al tratarse de un país tan extenso no podemos hablar de unas temperaturas generales, aunque si tuviéramos que definirlo diríamos que es continental, con inviernos muy fríos y veranos cálidos. La mejor época para visitar Rusia es en verano, que es cuando las temperaturas son más agradables, aunque por las noches refresca. Los inviernos son extremadamente fríos, pudiendo llegar a los 20º bajo cero. Pero si el frío no os asusta podéis visitar el país en otoño y disfrutar de los maravillosos paisajes nevados.