Luna de miel en Irlanda

La isla de Irlanda está situada en el punto más noroccidental de Europa y se caracteriza por su combinación de paisajes, historia, patrimonio y cultura. Es una buena alternativa para aquellos novios que no queréis pasaros el día tumbados en playas paradisíacas las 24 horas del día. Y es que Irlanda tiene mucho que ofrecer al visitante y dado su pequeño tamaño permite recorrer la isla en pocos días.

Se trata de un país con un sinfín de castillos, mitos y leyendas por conocer que no dejará indiferente a nadie. Hay mucho que explorar en Irlanda, por lo que la mejor recomendación es alquilar un coche y planificar vuestro propio viaje. Durante vuestra ruta por los sitios más significativos de esa tierra mágica no debéis dejar de probar su fascinante gastronomía. Os recomendamos el famoso Irish Stew, un estofado delicioso.

Y aquí está nuestra lista de visitas imprescindibles del país. ¡Lápiz, libreta y a tomar nota!

Dublín: Es la capital de la República de Irlanda. Pasead por las calles empedradas de Temple Bar, visitad el Phoenix Park (el parque más grande de Europa), dad una vuelta por Trinity College y probad la famosa cerveza irlandesa en la Guiness Storehouse.

Los acantilados de Moher: Ubicados en el condado de Clare, se han convertido en la principal atracción turística para los visitantes de Irlanda. Ofrecen vistas impresionantes del Océano Atlántico y de la imponente belleza de la costa oeste de Irlanda.

La Calzada del Gigante: Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Se trata de una maravillosa colección de más de 40.000 columnas de basalto muy juntas que va desde los acantilados de la meseta de Antrim hasta el mar. Las columnas tienen su origen en el rápido enfriamiento de lava procedente de un cráter cuya erupción tuvo lugar hace más de 60 millones de años. Los habitantes de esa zona tienen su propia leyenda al respecto.

Galway: La ciudad tiene su origen en una aldea de pescadores, aunque hoy día se ha convertido en una ciudad joven, dinámica y moderna. Un paseo por el centro de sus calles os hará descubrir las reliquias de su pasado medieval.

El castillo de Blarney: Está situado aproximadamente a 7 km de las afueras de Cork. Besar la Piedra de la Elocuencia, también conocida como la Blarney Stone, que hay en el castillo es obligación para todas las parejas de recién casados que acudan en su luna de miel a Irlanda. La leyenda cuenta que si besas la piedra por la parte de abajo estando suspendido en el aire obtendrás el don de la elocuencia y tendrás buena suerte.

Anillo de Kerry: Es un circuito turístico por el Condado de Kerry, situado en el suroeste de Irlanda. El circuito cubre 170 km de carretera, formando un círculo que comienza en Killarney, flanqueando la península de Iveragh. Pasa por Kenmare, Sneem, Waterville, Cahersiveen y Killorglin, antes de volver a Killarney nuevamente desde el sur, y bordeando los Lagos de Killarney y el Parque Nacional de Killarney. En este recorrido circular podréis gozar de la auténtica Irlanda más rural.

Y si os sobra tiempo visitad Belfast, una ciudad que ha resurgido de décadas de conflicto para convertirse en un destino vibrante y único. Y sobre todo disfrutad en cualquier rincón del país de la música en directo de cualquier típico pub mientras tomáis una pinta y charláis con su gente local. Es la mejor experiencia irlandesa sin lugar a dudas.