Luna de miel en Finlandia
Para aquellas parejas que busquen una luna de miel diferente en un país mágico y acogedor, Finlandia es el destino ideal.
Información sobre Finlandia
Finlandia, el "país de los mil lagos", es un país al norte de Europa, el sexto más grande en territorio aunque uno de los menos poblados en comparación. Las nieves, las bajas temperaturas, el sol de medianoche, las saunas y la naturaleza en estado puro son algunos de los elementos que le otorgan el romanticismo perfecto para ser un destino de luna de miel ideal.
Podemos dividir el país en sus distintas zonas geográficas, cada una con su encanto y sus atracciones turísticas. Tomad buena nota y no os perdáis nada si elegís este país para vuestro viaje.
Archipiélago. Partiendo desde la ciudad de Turku contemplaréis el espectacular paisaje que conforma uno de los archipiélagos más bellos del mundo. Miles de islas de todos los tamaños conectadas entre sí por puentes, ferris y transbordadores. Allí encontraréis las islas de Aland, una provincia autónoma y la región más grande, en la que se habla sueco y que es además una zona libre de impuestos. Desde Turku podéis coger cruceros con comida o cena para disfrutar del archipiélago en la época veraniega.
Costa Oeste. La costa oeste de Finlandia se caracteriza por cientos de kilómetros de costa, playas de arena y llanuras cultivadas. La historia, cultura y tradiciones marítimas del país se ven representadas en esta zona. En Rauma podréis visitar un barrio antiguo de casas de madera que se ha conservado en buenas condiciones y es Patrimonio de Humanidad de la UNESCO. Las playas más famosas que no os podéis perder son Yyteri en Pori y Kalajoki al norte de Kokkola. Además podréis disfrutar de la buena comida en Vaasa, visitar Oulu, una ciudad importante por su industria y la universidad y famosa por la hospitalidad de sus gentes.
Finlandia del sur. El sur de Finlandia es donde se concentra la actividad económica, la industria y la cultura. El área metropolitana de Helsinki la componen las cuatro ciudades Helsinki, Espoo, Vantaa y Kauniainen. Helsinki es una ciudad preciosa y marítima con una gran oferta cultural, siendo un punto de conexión entre este y oeste. Muy cerca podéis visitar Porvoo con un antiguo barrio de madera, sumergiros en el ambiente medieval y el castillo de la antigua capital del país, Turku, o visitar Naantali, otra ciudad con centro histórico construido en madera que vale la pena su visita.
Kainuu y Karelia. Los grandes amantes de la naturaleza y turismo activo o de aventura no os podéis perder esta zona llena de bosques inmensos. Lleno de parques nacionales, como los de Hossa y Kuusamo, que os harán experimentar lo que es la naturaleza virgen y respirar un aire nuevo. Disfrutad de las artes culinarias karelianas y subid a lo alto de las colinas de Koli para contemplar el paisaje finlandés por excelencia sobre el lago Pielinen.
Laponia. Una zona más grande que algunos países, naturaleza y belleza allá donde miréis. En esa zona hay más renos que habitantes, los sami, con su cultura, lengua y tradiciones especiales que conservan celosamente. Aquí encontraréis los parques nacionales más grandes del país y es también la tierra de Papá Noel, en Rovaniemi. Laponia es para realizar actividades y disfrutar de la vida a otro ritmo.
Región de los Lagos. En un país con tantos lagos es difícil definir dónde se concentran más pero sin duda estaríamos hablando desde la ciudad de Tampere y pasando por Jyväskylä, Kuopio, Mikkeli y Savonlinna a Lappeenranta. Visitad el lago Saimaa, el más grande de Finlandia con más de 4.000 km2. El lago Saimaa está conectado con el mar por el canal de Saimaa por cuya ruta podéis llegar a visitar Rusia (Viaborg) en barco sin necesidad de visado. Los barcos salen desde Lappeenranta. Lo bueno es que la mayoría de los lagos grandes están conectados entre sí por lo que podréis visitarlos todos fácilmente.
La mejor época para visitar Finlandia es de noviembre a marzo si queréis disfrutar de la nieve y los paisajes auténticamente fineses en su estado puro.