Decidimos celebrar nuestra boda en el Hotel La Costa, basándonos en las recomendaciones que nos dieron, el encanto del lugar, los menús, y los precios. Solo puedo decir que el día superó todas nuestras expectativas.

La comida fue extraordinaria, tanto por calidad como por cantidad. Conocimos al chef antes de la boda, y solo podemos alabarlo por los detalles que tubo para que la comida fuese algo personal que nos representara a los dos. Hizo que el día aun fuese más especial, todo el mundo nos lo está comentando, incluso días después de la boda.

Generosos con las bebidas y con un equipo muy profesional, todos fueron muy agradables, pendientes de los invitados, y siempre dispuestos a ayudar. También mencionar al jefe de sala, Joan, una persona atenta y de trato muy familiar. Dirigió todo el día de una manera impecable. Nos hizo sentir como en casa, y algo que todos los invitados han repetido una y otra vez fue el ambiente de la boda, que se logró gracias a su coordinación. ¡Solo decir que fue el ultimo en marchar!

El lugar es precioso. La única reserva que teníamos era tener que cruzarnos con los huéspedes del hotel, pero no fue así. En todo el día no nos cruzamos con nadie, ¡fue una boda muy intima en un resort! El hotel también nos ofreció una habitación para la noche de bodas, donde nos dejaron quedar todo el día siguiente con acceso a la piscina. ¡Qué bien nos fue para recuperar las energías!

La única sugerencia que podemos hacer es que si decidís realizar una boda de día y queréis seguir bailando hasta pasadas las 00:00 horas, entonces reservad la disco. La organizadora de eventos del hotel nos recomendó no reservarla, porque las bodas no suelen duran tanto. El día de la boda los invitados nos dijeron que medianoche les parecía muy poco. y al llegar al hotel después de la ceremonia, les pedimos si podían abrir la discoteca para seguir la fiesta más tarde, pero nos lo negaron. Nuestros invitados tuvieron que organizar taxis para ir a otro sitio a continuar la fiesta.

En resumen, estamos empezando a organizar el 60 cumpleaños de mi padre, ¡y estamos considerando volver!

El hotel está preparado y acostumbrado a realizar eventos de este tipo bodas, reuniones, fiestas. El trato en todo momento fue correcto y adecuado. Quizás faltaba pulir algún detalle pero nada importante como para no confiar en ellos.