Verónica, es un encanto de mujer, dulce y que supo captar los momentos para hacerlos mágicos. Además me gustaría destacar su mano maravillosa que tuvo con mis hijas, se las ganó desde el minuto uno que estuvo en casa. Sin duda, no dudaría en elegir a una gran persona y una gran profesional. Saldréis encantados.

Tuvimos la suerte de contar con Vero como fotógrafa en nuestra boda, y no podríamos haber estado más satisfechos. Desde el primer contacto, la comunicación fue sencilla, rápida y cercana; nos hizo sentir cómodos y confiados en su trabajo. Nosotros optamos por un pack que incluía una sesión de fotos de preboda, lo que nos permitió conocer su estilo y sentirnos aún más cómodos el día de la boda.

Lo mejor de todo es que logró que mi marido, que no es fan de las fotos, se sintiera súper cómodo y relajado con ella. Durante la boda, su profesionalidad y discreción fueron impecables, capturando cada instante sin interrumpir la magia del día. Supo adaptarse perfectamente a cómo somos, permitiéndonos disfrutar a tope de cada momento, y con ella, todo salió de 10.

El resultado nos encanta: sus fotos están llenas de detalles, emociones y los colores son simplemente increíbles. Ha sido, sin duda, la mejor inversión que hemos hecho en proveedores de boda. Después de la boda, volvimos a confiar en ella para nuestra sesión de fotos de embarazo, y ahora no puedo imaginar a otra persona ayudándonos a capturar los mejores momentos de nuestra vida. Mil gracias, Vero, por tu profesionalidad y por regalarnos recuerdos que durarán toda la vida. ¡Recomendamos a Vero a cualquier pareja que busque inmortalizar su boda de forma única y auténtica!