Yo no hago fotos de boda, plasmo en imágenes el espíritu y las emociones que cada persona vive en ese acontecimiento.

Lo que me interesa es plasmar en imágenes las emociones que se viven en un día tan especial. Los que me conocen dicen que soy una persona muy sensible, quizá por eso siempre acabo emocionándome. Me implico en la alegría y la emoción que se respira todo el día formando parte del todo y siendo una más. Así pues, ya llevo más de veinte años en estos menesteres y las bodas son mi hábitat natural. La discreción y el saber estar en cada situación son fundamentales.

Plasmar en una imagen el alma de una persona es un reto difícil y apasionante a la vez. He realizado todo tipo de reportaje social, actos protocolarios, eventos de empresa… Y un sinfín de encargos que relacionarlos todos ahora sería una ardua tarea. También estoy haciendo shootings para tiendas de moda.

No puedo abandonar la vertiente creativa y una vez al año hago alguna exposición, pero siempre compaginándolos con lo que es mi especialidad y mi pasión: capturar los momentos más importantes y todas las emociones que viven las personas en ese día tan especial para ellas.

He publicado tres libros de retratos, las personas y sus emociones es lo que más me interesa.

Siempre intento que mis videos estén llenos de sensaciones, emociones y magia. Estudié Técnico Superior en Imagen en EMAV y esto me ha proporcionado un conocimiento profundo del medio que utilizo. Siempre me dicen que al ver mis reportajes, están reviviendo todos los instantes con la misma intensidad que sucedieron.

Me preocupo de que mi trabajo sea pulcro y elaborado, sobre todo en la edición. Y procuro que cuando veas tu reportaje de video no te deje indiferente. Te invito a visionar una pequeña muestra en este mismo escaparate.