Nací en Burgos, aunque mi sangre es cántabra, además de burgalesa.

Me crie entre el campo y la ciudad, siempre soñando con las estrellas, en invierno con el sol, y con las nubes en verano. Soy un apasionado de la naturaleza y durante años he trabajado en el bosque enseñando la belleza de este mundo a todo aquel que quería descubrirla conmigo.

Soy una persona abierta, muy extrovertida, me gusta conocer gente y gente… Y que pronto dejen de ser gente para convertirse en buenos amigos. Soy amigo de mis amigos, y lo mejor sería poder estar con todos ellos tomando una buena cervecita escuchando rock and roll. Me gusta aprovechar cada momento, disfrutar el hoy y soñar con el mañana. Me encantaría poder volar para ver el mundo desde arriba, sin ruido, sin gente, todo pequeñito y sentirme un poco más grande.

Estoy casado con Raquel, tengo un ratoncito, Mario (ya tiene ocho añazos, pero para mí siempre será mi bebé), y una pequeña, Naia, que hacen que mi vida tenga sentido.

Me encanta ser fotógrafo y mi único objetivo es llegar a casa con la sensación de que he sido capaz de llenar mis bolsillos con vuestras sonrisas, con vuestras miradas, con vuestros abrazos… Con vuestra felicidad, porque eso hace que yo también sea enormemente feliz.

Soy una persona muy abierta, extrovertida, algo loco... O eso dicen los que me conocen bien. Soy sencillo, y disfruto de las cosas y de los momentos más pequeños, creo que en ellas están las cosas más bellas. Adoro lo natural, lo simple, la espontaneidad, una mirada sincera, un abrazo, una cerveza fría, una foto colgada en una pared, un retrato de alguien con personalidad, mi familia, mi gente...

Hace más 20 años que soy fotógrafo y, aunque he tenido la posibilidad de trabajar en otros sectores, como la fotografía documental, nada hay que me motive más que una bonita historia.

Tener la oportunidad de crear algo maravilloso, un legado, con vosotros siendo eso, vosotros, sin artificios, ni poses, disfrutando, riendo, sintiendo esos nervios maravillosos, capturando vuestra verdadera esencia y, sobre todo, siendo vuestros ojos cuando vosotros no podéis mirar y mirando cuando creéis que no os miran, captando todo aquello que sucede a vuestro alrededor, las sonrisas, las lágrimas, la diversión, los pequeños detalles, ¡las cosas que son importantes!