¿Por dónde empezar? Sin duda, el/la fotógrafo/a es de las cosas más importantes para unos novios, y contar con Miriam y el pistolero Nacho (madre mía, qué manera de desenfundar sus cámaras), ha sido la mejor elección que podíamos haber tomado. Cercanos, sencillos, amables y sobre todo, superprofesionales. Nos hicieron sentir supercómodos y además, es que fueron una atracción para todos los invitados porque su manera de trabajar, acompañada de su humor y su profesionalidad, hizo que todos los invitados días después, aún siguieran hablando de ellos. Además, visto un pequeñísimo adelanto de su trabajo ese día, el resultado nos ha dejado boquiabiertos; qué locura de fotografías. Una vez pasado nuestro gran día, solo podemos decir que fue la mejor decisión que pudimos tomar al contar con Miriam. Gracias de corazón y estamos seguros que nos volveremos a encontrar.

Mi chico y yo no dudamos, Miriam ha sido nuestra primera opción en fotografía y estamos supercontentos con ella. No nos gusta nada posturear ni posar, queríamos que nuestras fotos reflejasen lo que vivimos y sentimos, sin sentirnos forzados. Miriam hace magia. Desde el minuto 1 es como si la conocieses de siempre y te hace sentir genial, supercómoda. Es como si te estuviese haciendo fotos una amiga de toda la vida. Además, es una crack captando cada detalle, se interesa por conocerte y "no molesta". Hace fotos que luego cuando las ves dices "¿pero en qué momento la hiciste?" Jajajaja. No te das ni cuenta de que está ahí haciendo fotos. ¡Es genial! Y a mí personalmente me encanta la dulzura que su trabajo transmite. Tanto profesional como personalmente es de 10. Gracias por volcarte tanto, cielo, a todos los niveles. Sabemos que no ha sido fácil, pero no lo has podido hacer mejor. Amenazamos con que este es solo el principio jajajaja. Tus "chicos disfrutones" estamos encantados contigo, lo sabes. Un abrazo grande, grande. P.D: Y gracias de corazón también a su equipazo, Mónica y Mariví. Supieron captar nuestra esencia, lo dieron todo y no pararon de trabajar ni un segundo. ¡Muchas gracias, chicas! Sois maravillosas.

Con Miriam, ha sido todo tan fácil elegirla. Desde antes que supiéramos que nos casábamos, pensaba en Miriam como fotógrafa. Ya la conocía de otras bodas en las que he estado, sus fotos son tan dulces y preciosas, que tenía claro desde el momento 0.

Las reuniones con ella antes de la boda preguntando todos los detalles, haciendo listas de la gente que no podía faltar para fotografiar. El día de la boda super atenta a todo el mundo, no se le escapó ni un detalle ni a ella ni a su compañera.
Tremendamente maravillosa. Muchas gracias por todo, Miriam.

Miriam es una fotógrafa genial. Increíblemente profesional desde el primer minuto que hemos estado con ella: preboda, boda y posboda. Nos encantó la manera que tiene de captar los momentos y las fotos que tenemos para nuestros álbumes son preciosas. Las sesiones con ella han sido siempre muy cómodas y fluidas y Miriam sabe sacarle siempre un toque muy natural y profesional a sus fotos. Vale cada céntimo pagado por sus servicios, absolutamente recomendable.

Conocí a Miriam porque fue la fotógrafa de mi hermana en su boda. Sabía que ella sería también mi fotógrafa, desde el momento que vi la profesionalidad con la que trabajó en la boda, así como la amabilidad, cariño, educación y predisposición con la que trató a toda mi familia, especialmente mientras nos preparábamos para salir a la ceremonia. La calidad y naturalidad de las fotos es impresionante, lo cual es importante cuando no somos personas acostumbradas a posar y no queremos fotos muy formales o frías. Nuestras mejores fotos son las que se captaron cuando no estábamos mirando a la cámara. No creo poder haber elegido mejor, ¡no puedo tener mejores fotos de mi boda! Mil gracias por todo, Miriam.

Nos encantó la sesión de fotos, fuimos con nuestros niños de 4 y 6 años y las fotos son preciosas, una mirada limpia detrás de la cámara. Quiero dar las gracias a Míriam por su simpatía y por el trato a mis pequeños tesoros, lo recomiendo 100%.

Tuvimos la suerte de contar con Miriam como fotógrafa para el día de nuestra boda. Se nota la profesionalidad, su buen hacer y el cariño que le pone a su trabajo, cuyo resultado es simplemente magnífico. Miriam se amolda a las preferencias, da facilidades y se nota que disfruta con lo que hace. Por nuestra parte, además de estar tremendamente agradecidos por un trabajo bien hecho (que seguimos disfrutando al volver a ver las fotografías de la boda más de un año después), la recomendamos encarecidamente a todo aquél que quiera tener el mejor recuerdo posible de su boda.

Sin duda alguna, si nos volviéramos a casar la elegiríamos a ella. Por su profesionalidad, el cariño y empeño que le pone, por buscar la foto perfecta y por supuesto por la gran profesional. A partir de nuestra boda será la fotógrafa de nuestra familia. 100% recomendable.

Miriam es un dulce. Te hace sentir muy cómoda ese día, siempre está muy atenta a cualquier necesidad y a captar momentos importantes. Lo que nos convenció de su estilo de fotografía es que hace fotos muy naturales, casi "robadas", aunque se adapta a cualquier tipo de petición y escenario. Ni tú ni tus invitados percibiréis su presencia a pesar de que están ahí en todo momento. Discretísima sin perder detalle. Recomendable 100%.

Miriam es una profesional excepcional, no podemos estar más contentos con la elección, fotos increíblemente bonitas, captando sentimientos, miradas, lágrimas. Ver las fotos es volver a vivir aquel día. Realmente captó lo que queríamos. Ella es encantadora y te hace sentir súper cómoda. Las fotos súper naturales, no te das cuentas no que están allí, yo había momentos que no sabía si estaba. Yo la elegiría mil veces más.

Muy buena profesional, unas fotografías preciosas y muy naturales. Se adapta mucho a tus tiempos y tu forma de ser para hacer un reportaje que no sea nada artificial. Antes de la boda intenta conocerte para hacerle sentir muy cómodos a los novios. Prácticamente no nos dimos cuenta de que estaba ni en la celebración ni el en convite.

En esto tampoco tendría dudas, si me casará nuevamente, Miriam Duarte sería mi fotógrafa de todas todas. Absolutamente perfecta, es una grandísima profesional, sus fotos son espectaculares, y sí es gran profesional, aun es mejor persona. Hace del momento de las fotos algo único y divertido. Y qué decir de sus photocall, los invitados disfrutaron muchísimo, aun siguen recordándolo cuando nos ven. 100% recomendable.

La verdad es que no es fácil valorar con palabras el trabajo que realizan los profesionales; pero intentaré expresarlo lo mejor posible. Sinceramente el tema del reportaje fotográfico me echaba un poco para atrás ya que me considero poco fotogénico y algo tímido, pero sin embargo llegado el día de la boda, el tema de las fotos fue lo que menos me preocupó.

La forma de trabajar de Miriam en mi opinión es la mejor, ya que siempre está ahí captando esos momentos llenos de sentimiento, pero evitando que te sientas acosado por la cámara, ¡con lo que saca unas fotos de revista! Eso sí, siempre que queríamos alguna foto en particular la avisábamos.

Previo a la boda nos realizó un cuestionario para saber qué momentos y con qué personas sí o sí tenía que hacernos una foto. Y sin lugar a dudas el resultado, inmejorable.

A todos nuestros allegados les ha encantado el álbum de boda. Y por último, de Miriam qué decir, pues que es una chica muy maja, y siempre está ahí para ayudar a los novios en esos momentos de tantos nervios. Así que contratar con ella el reportaje de boda es una opción más que acertada.

Combinar cercanía y profesionalidad no parece un trabajo fácil hasta que te encuentras con Miriam y Mónica. Dos fotógrafas comprometidas que nos hicieron estar cómodos en un día de tantas emociones. Gracias por retratar con tanto gusto uno de los días más importantes de nuestras vidas.

¡La mejor decisión que pudimos tomar! Gran profesional y mejor persona. ¡Se adaptó, y plasmo todo lo que le propusimos! ¡Repetiríamos mil veces más!