Mi nombre es Diego Arenas, un apasionado de la fotografía de bodas. Gracias por haber llegado hasta aquí, es hora de conocernos...

Mi sello personal es una simbiosis perfecta entre la fotografía documental y la romántica. Trabajo como un fotoperiodista, contando una historia de forma cronológica con el objetivo de captar todo lo que sucede. La naturalidad y espontaneidad por bandera. Gracias a este estilo obtendrás un reportaje único, ya que no existen dos bodas iguales.

Considero que soy una persona cercana, por lo que el trato con la pareja es fundamental para conseguir el resultado que deseo. Algo tan simple como tomarnos un café, unas tapas o charlar, me aporta la esencia de vuestra personalidad, gustos, inquietudes, detalles de la boda... y sobre todo hacer un vínculo especial para que nuestra relación sea más parecida a unos “amiguetes” que a unos clientes.

Quiero irme a casa con la mochila cargada de vuestras sonrisas, de vuestros besos, de vuestras caricias, de vuestros abrazos y, en definitiva, de vuestro amor.