Hola, soy David Delgado.

Tengo más de treinta y menos de cuarenta, soy de Zaragoza y vivo en Lleida hace más de veinte.

Enamorado de mis dos princesas Paula y Cintia, a la primera le enseño a multiplicar y a la segunda le cambio pañales. ¿Sinceramente? ¡Son el motor de mi vida, muy creativas, me enseñan mucho!

Soy un apasionado del buen cine y no entendería una vida sin música, me encanta caminar bajo la lluvia mientras veo a la gente correr y observar los reflejos que deja el agua a su paso, inquieto por naturaleza porque siento muchas curiosidades, soy nostálgico y no me gusta el café.

¡Ah, y también me fascina la fotografía! Siento interés y mucha admiración por la fotografía de bodas. Dejarme plasmar los sentimientos de las personas en uno de los momentos más importantes de sus vidas, es algo muy emocionante.

Además de ser autodidacta, estudié a distancia en el New York Institute of Photography. Aprendí y sigo aprendiendo en talleres y masterclasses con maestros de la fotografía de bodas de todo el mundo. Nunca dejaré de aprender porque va innato en mí; la vida es ese camino donde tienes que superarte y ser mejor cada día.

Delgado, un apellido con mucha solera… Echando la vista atrás me di cuenta que me hice fotógrafo siendo un niño. Contemplaba a mi tío y querido padrino cómo manejaba su cámara y revelaba en su laboratorio casero. Por desgracia ya no lo tengo conmigo y hoy en día añoro no tener las suficientes fotos con él.

Siento mariposas en el estómago cuando pienso que vivo de mi pasión y por tener la suerte de vivir instantes con personas, que me recordarán por un momento feliz de sus vidas y que quedará en sus memorias para siempre… A todas ellas, muchas gracias por confiar en mí.

David.