Opiniones de Pazo de Vilaboa

Nos casamos el pasado 2 de noviembre y no hemos podido quedarnos con mejor sabor de boca, todo salió a la perfección. El entorno en el que se localiza el pazo es inmejorable. La cocina excepcional, todos los invitados quedaron encantados y muy a destacar la profesionalidad de todo el equipo, en especial Rocío y Emilio, que se encargaron de que todo estuviera de 10.
Si nos volviéramos a casar lo elegiríamos con los ojos cerrados.

Conocimos el pazo de Vilaboa a través de las redes sociales. Fuimos un poco a ciegas, ya que no habíamos ido a ninguna boda allí.
Sin embargo, desde el minuto uno mi chico y yo tuvimos claro que no necesitábamos buscar más.
El lugar desprende una magia indescriptible: los interiores del pazo, los patios, los jardines…
Nos impactó mucho ver la belleza que se esconde detrás de esos muros de piedra.
Y si la parte arquitectónica nos encantó, la parte humana directamente nos enamoró. Como ya les dije el día después de nuestra boda, la palabra profesionalidad se queda corta con ellos: organizados, amables, resolutivos. Os prometo que no hay un pero. Gracias a Rocío, Lara, Fabián y todos los que formáis parte de Vilaboa. Sois un 15, porque un 10 se queda corto.
Y, por si fuera poco, la comida está a otro nivel.
Nuestros invitados no dejan de repetirnos días después de la boda lo mucho que les gustó todo: cantidad, calidad, sabor y elaboración.
En resumen, volveríamos a elegirlos una y mil veces.
Gracias por todo.


Silvia y Adrián

Aunque en un inicio dudábamos de si hacer allí nuestra celebración porque no habíamos ido a ninguna, ahora sabemos que fue la mejor decision. Lara y Fabian son 🔝, se echaran en falta, pero entre su profesionalidad y el encanto del pazo y sus jardines volveriamos a elegirlos.

Haber hecho nuestra boda en el Pazo de Vilaboa fue la mejor decisión que pudimos tomar. Tienen una profesionalidad absoluta basada en su amplia experiencia. El acompañamiento de Lara fue excelente durante todo el año de preparativos. Atienden todas las dudas y peticiones con un cariño absoluto. Además, el propio pazo es precioso, hace que la decoración necesaria sea mínima. Su ubicación también es muy buena al estar cerca de Coruña y con algún hotel a poca distancia andando para la gente que viene de fuera.

La comida, al tener chef propio, es increíble (todo el mundo salió encantado) y los puestos que ofrecen una maravilla (nosotros pusimos bivalvos -espectacular- y filloeira -que se queda toda la barra libre y la gente la amó-).

También nos quedamos en la suite y por la mañana el desayuno que ofrecen es idílico.

En definitiva, la mejor decisión para nuestra boda.

Muy contentos con la gestión de nuestra boda.
Tanto Lara (organizadora) como Fabián (chef), nos han acompañado en las decisiones, dandonos su opinión con la experiencia que tienen y al mismo tiempo cuidando detalles. En todo momento tratando nuestra boda como si fuese para ellos, lo cual es de agradecer por parte de la organización.

De las mejores decisiones contar con ellos.

Al principio el Pazo de Vilaboa no estaba dentro de nuestras opciones, pero un día decidimos ir a verlo, y ya no quisimos ver más. Para nosotros tenía todo lo que buscábamos, está cerca de A Coruña, podíamos vestirnos en él, los invitados entran dentro del propio pazo, que muchos que fuimos ver no se puede entrar, y lo más importante, si llovía el plan b también nos gustaba. A nosotros nos tocó Lara, y ella nos ayudó mogollón en todo, proveedores, dudas, siempre estuvo disponible, y muy pendiente de todo desde el primer día y el día de la boda más. Fabián nos ayudó a elegir el menú y fue un acierto porque todos los invitados estaban encantadísimos con el menú y con el servicio , los camareros estaban muy pendientes de los invitados para que no faltase nada, y a la hora de servir las mesas había uno por mesa, por lo que todos teníamos la comida a la vez.

Andres y yo conseguimos tener el evento que realmente queríamos.
Queríamos alejarnos de protocolos estrictos y situaciones estiradas.Nuestro día fue simplemente perfecto!! Divertido,relajado, feliz!!! Y no solo para nosotros sino para todos los asistentes ,al menos eso transmitían sus caras.
No dudaría en volver a elegir el mismo sitio.
El Pazo de Vilaboa fue perfecto para conseguir lo que buscábamos: evento relajado pero muuuy bonito , con buena comida ,buen vino ( yo queria un vino concreto y lo consiguieron para nuestra boda) y buena música en un entorno precioso con posibilidades para que cada uno se sienta libre de hablar,beber,bailar,fumar o simplemente pasear y observar.
El equipo ,en nuestro caso guiado por Lara,supo entendernos y consiguió plasmar en el evento todo aquello que buscábamos.
En ningún momento nos sentimos pendientes de cada paso,el equipo del Pazo se encargo de todo.
Repetiría con los ojos cerrados. Realmente son conseguidores de deseos.
No podemos más que agradecerles mil veces que nos entendiesen tan bien .Una suerte haberlos elegido!!!!

Estupendo día, a pesar de que fuera estaba lloviendo y hacía frío un 10 de febrero. Estupenda organización. Repetiríamos una y mil veces ese día en el Pazo de Vilaboa. De 10. La boda de nuestros sueños. Nosotros disfrutamos un montón y los invitados también, les encantó todo, el lugar, los pinchos que son espectaculares, la comida, la fiesta posterior y la recena ... De las mejores opciones para celebrar tu boda, y desde luego para nosotros la mejor, sin duda alguna.

Muy recomendable, muy cómodo, cerca de la ciudad y el pazo es precioso. No necesitas contratar a wedding planner, ellos te planifican todo.

El Pazo, el entorno y las instalaciones son preciosos y se nota que lo tienen muy cuidado (las fotos no hacen justicia, de verdad lo digo), pero sin un equipo como con el que cuentan, no sería posible hablar de la boda de nuestros sueños.
Sabemos que el equipo lo forman muchas personas y todas ayudan a que todo salga perfecto ese día, pero no sería justo no hacer una mención especial a:
- Rocío: nuestra organizadora del evento allí. Se encargó de aconsejarnos y de guiarnos en la organización de la boda. Desde el primer momento, nos ayudó a contactar con proveedores y a gestionar los espacios del Pazo para sacar el máximo provecho. El día del evento estuvo en todo momento pendiente de que todo saliera según lo previsto y de que nosotros sólo nos preocupáramos de disfrutarlo.
- Fabián: el jefe de cocina. Desde el inicio, se implicó con nosotros para elegir el menú y recomendarnos platos que podrían gustar a los invitados y cantidad (algo que se agradece para nunca quedarte corto, sin necesidad de poner demasiado). Creo que su equipo y él hicieron un trabajo de 10. Todos los invitados quedaron encantados con la comida y las personas con alergias, intolerancias o un menú especial (para nosotros esto era un punto que nos preocupaba especialmente) se sintieron cuidadas y seguras en todo momento y disfrutaron de toda la comida.
- Emilio: el maitre. En sala se convirtió en el primer contacto para cualquier cosa que necesitáramos. Pendiente de todo detalle (incluso de poner más mesas a la sombra en un día de 33º durante el cóctel)
- Lara: tomó el relevo de Rocío por la tarde y se ocupó de que todo continuara a la perfección
Cuando a unas personas les gusta su trabajo y son profesionales de ello, se nota. Nosotros sólo podemos dar las gracias y recomendaros una y mil veces más.