El pasado 30 de septiembre celebramos nuestra boda en la Quinta San Antonio y no tengo más que buenas palabras para el equipo.
A nivel profesional un 10. El seguimiento con Micaela ha sido fácil y muy eficaz, Emilio y Gloria tanto en la prueba con el boda en sí, nos dieron un servicio perfecto. Controlaron los tiempos y se adaptaban a nuestras peticiones o nos daban una información clara de lo que no era posible y buscaban alternativas que nos gustasen.
Todos nuestros invitados quedaron encantados con la comida, tanto como por el coctel como por la cena. Los camareros perfectos, tanto en número como en calidad. En la barra libre todo fueron primeras marcas y el dj se adaptó a la música que queríamos y accedía con una sonrisa a todas nuestras peticiones. Los dos camareros que nos sirvieron en la barra libre estuvieron muy atentos y complices con nosotros.
También quiero destacar la calidad humana de todo el equipo, nos han apoyado en todo momento más haya de lo que implica una relación proveedor - cliente. Se nota que la Quinta se trata de un negocio con cariño. Durante el proceso de la boda sufrimos unos imprevistos graves que nos conllevó cambios de fecha de último momento y por parte de la Quinta nos dieron flexibilidad y comprensión ante nuestro problema. Dudosamente hubieramos recibido ese apoyo algún otro tipo de negocio, y más en el mundo boda que está todo tan extremadamente mercantilizado.
Si volviera a organizar mi boda lo haría en la Quinta sin dudarlo, y tengo pensado ir en todos los aniversarios a celebrar en su restaurante.
Gracias a todo el equipo de la Quinta por ser parte de mi día especial

La comida buenísima y el servicio perfecto, fue una boda perfecta, el sitio precioso. Gracias a la maitre que nos atendió que fue encantadora y a Micaela, la organizadora que hizo que todo estuviera perfecto 👌

Es un sitio muy agradable, con un bonito jardín, un salón amplio para las mesas y para la zona de baile. La atención es muy buena y la comida es exquisita.

Me he casado el 02 de Marzo y no pude elegir mejor sitio para celebrarlo.
La boda ha sido un exito. Hizo muy mal dia pero supieron buscar la manera de que todo funcionara genial metiendo el coctel dentro en un sitio recogidito y familiar.
He organizado mi boda en 2 meses con la locura que conlleva acompañada de Micaela, es magnifica, cariñosa, eficiente… de verdad! No trngo palabras para ella.
Mis metres Gloria y Emilio atentos, profesionales y super cercanos, de verdad que gusto hacer cosas asi con gente tan tan guay. Habeis echo que sea un dia inolvidable con todo el equipo! Sois geniales, me habeis acompañado en todas nuestras locuras y eso es increible!
Teneis un cachito de mi corazon con vosotros. Sois increibles !!!

Nuestra boda fue de unos 60 invitados. Queríamos una boda íntima y familiar. Que el espacio fuera para montar ceremonia y banquete.
Desde nuestra primera visita hasta el final, siempre nos sentimos arropados y atendidos. Siempre por parte de todo el equipo pero sobretodo por Micaela.
La comida en sí fue espectacular. Y un montón de cosas nos incluyeron en el momento de la boda en si. Tanto como flores, detalles en las mesas, etc.
Nuestros invitados quedaron encantados con el trato de los camareros. Tanto cóctel como cena, estuvo todo buenísimo. No esperábamos menos después de la cata que nos dieron.
Siempre nos dieron libertad y facilidad para montar la boda que queríamos.
La misma semana de la boda nos dieron el espacio para llevar cosas y mobiliario.
Destaco la comunicación y el trato por parte del restaurante.

Nada que ver el trato a la hora de contratar con el resto de visitas, el servicio poco profesional, nos dijeron que no quedaba Red bull y al día siguiente encontramos la caja debajo de la barra, la megafonia no funciono durante toda la ceremonia, se olvidaron de poner detalles en las mesas de invitados, no pusieron las letras decorativas... es lo que tiene contratar con uno, llevar cosas con otro y que la boda la dirija un tercero. Luego pasan la bola de unos a otros y no dan explicaciones.

Somos clientes habituales de la Quinta de San Antonio de Velilla, por eso decidimos celebrar allí nuestra boda sin dudar. Estuve en contacto todo el tiempo con M., y todo fenomenal con ella, la organización estupenda, pero llegó el día de la boda y el maitre que estaba ese día E., nos dejó mucho que desear, a mi y a mi familia, solo le vimos aparecer en dos momentos, en la entrada al salón y el corte de la tarta. Yo había solicitado previamente varios platos de pescado que estaban sin preparar, no entiendo por qué. Todos los demás momentos como regalos, y otras sorpresas de los invitados que tan claro había quedado todo con M. (ella lo tenía todo apuntado) , tuvimos que coordinarnos nosotros mismos y mis invitados con el dj, de hecho el brindis se quedó sin hacer ya que no tuve a nadie que me guiara en ese día tan importante, y nosotros ya no llegamos a tanto... Ya que cuando llevas casi un año organizando tu boda lo que necesitas es que ese día te guíen porque el tiempo se pasa volando y en mi caso no tuve a ese guia, ahora recapacitando después de unos días de la boda me doy cuenta de que estuvimos bastante abandonados en ese sentido. El resto del servicio le seguimos dando un 10, la comida espectacular como siempre y los camareros fantásticos, gracias a Jesús especialmente.

Todo fueron facilidades con los preparativos. En concetro, Micaela fue muy flexible. Por ejemplo, tuvimos invitados con dietas especiales y pudimos adaptar platos sin problema. Además, un par de invitados nos cancelaron un día antes de la boda por motivos de salud y nos dejaron quitar sus menús. También tengo muy buen recuerdo de cuando fuimos a hacer la prueba del menú. Emilio nos dió muy buen servicio ese día, fue amable y estuvo pendiente de nosostros. El standardar se mantuvo en el día de la boda. La comida estaba muy rica y el personal estuvo atento en todo momento. Además, puedes traer el fotógrafo que quieras. El DJ venía incluido en el `precio del menú, lo cual vimos como otra facilidad y nos puso las canciones que le pedimos y los estilos de música que le indicamos para la fiesta. Pudimos personalizar la decoración del sitio y quedó precioso, tal como lo queríamos. Finalmente, son muy razonables de precio. Sin duda, recomendaré esta finca a familiares y amigos y contaremos con ellos si tenemos otro evento. Gracias por contribuir a que nuestro día fuese tan especial. Un abrazo, Carmen.

Desde el momento que fuimos a ver la quinta supimos que era el sitio donde teníamos que hacer nuestra boda. Y sin duda, fue la mejor decisión que tomamos. Desde el primer momento tanto Emilio como Gloria y Micaela, estuvieron atentos de todo. No nos pusieron ningún inconveniente y el día de la boda salió todo a pedir de boca. Tengo claro que amigos y quién me diga que se va a casar, les voy a recomendar este sitio.

No pudimos elegir sitio mejor para el mejor día de nuestras vidas. Gracias a todo el equipo, hicisteis de nuestro día algo más especial si cabe. Siempre agradecidos

Estábamos muy nerviosos con nuestro grande día y todo salió a la perfección. Sin la ayuda y la entrega de Emilio, Gloria y Mihaela nada hubiese sido lo mismo. Eternamente agradecidos con ellos. Todo el mundo estuvo a gusto y contentísimo.

Feliz de haber celebrado mi boda. Gloria y Emilio son lo máximo, hacen que ese día tan especial salga perfecto.

El mejor sitio que hemos elegido para celebrar la boda sin ellos no hubiera salido tan perfecta la boda, salió todo perfecto, la comida espectacular el servicio perfecto recomendable al 1000 por 1000. Y también quería dar las gracias a Emilio, Catalina y a gloria, que sin ellos no hubiera sido lo mismo, nos organizaron la boda que queríamos y atentísimos son increíbles. Muchas gracias.

Gracias a Catalina, Emilio y Gloria en especial por vuestro trato y trabajo duro.
Escogimos la Quinta hace más de un año en plena pandemia sin saber cómo podríamos celebrar nuestra boda. Con varios familiares que tienen una Salud delicada … queríamos tener todo bien cerrado, así que confiamos en ellos y sin duda acertamos.

Primero destacar lo profesionales que son en el trato al cliente, te responden a todas las preguntas de forma rápida, concisa y educadamente (que sinceramente no siempre nos ha pasado en los primeros presupuestos con otros lugares).
Una vez contratados todo el tiempo nos han ayudado a cualquier cosa que necesitáramos, a miles de preguntas y comentarios que teníamos porque uno no se casa todos los días y todo es nuevo.

Segundo destacar, lo impecable de la calidad de la comida y vinos. Excepcional … Elegimos menú cena de primero, principal y postre que fue reforzado por un cóctel de 12 platos con una variedad estupenda y una calidad que a todos los invitados les encantó. Nosotros vamos a repetir al restaurante que tienen (que esto siempre te da confianza extra, que tienen su propia cocina, no es catering).

Los salones son de buen tamaño y tienen unos jardines preciosos, que sin agua no dejan de ser cómodos y románticos.
Nos dejaron decorar con motivos personales la finca para darles tonos nuestros, lo llevamos 2/3 días antes y lo recogimos al siguiente del evento.

Finalmente, ¡decir que lo puedes personalizar todo! Esto era importante para nosotros, hacen un evento de jornada de puertas abiertas para elegir la mantelería, bajos platos, flores, etc. pensábamos que nos pondrían dos cosas a elegir y fue impactante porque tienen diversidad de colores, diseños y el florista va al lugar el mismo día para diseñar contigo los centros.
Todo es único para ti.
También puedes conocer a la compañía de música y córners extras.
En otros sitios a los que hemos ido, no nos permitían ni seleccionar el mantel.

De nuevo gracias a todo el equipo, ¡porque salió perfecto cada segundo!
Si estás buscando un buen lugar donde celebrar tu boda, no lo dudes, la Quinta de San Antonio es perfecta.

En nuestro caso fue una boda íntima, tan solo 23 comensales. Aun así nos hicieron pasar un día inolvidable, todo fue como lo previsto o mejor aún si cabe. Más que recomendado para este tipo de celebraciones. Es una finca muy especial y con muchas opciones. Los servicios y el personal, excelentes.