Calidad en el servicio, calidad en la comida, entorno inmejorable y unas instalaciones muy bien acondicionadas para la celebración de un evento tan importante como tu boda. Para nosotros ha sido la mejor elección posible.

Teníamos claro que queríamos hacerlo aquí. Además Pili lo pone todo muy fácil. El día de la boda para is que iba a llover pero al final se arreglo el día y pudimos disfrutar del jardín. Volvería a repetir allí 1000 veces más!

No podemos estar más agradecidos a Pili por hacer de nuestro día un recuerdo para toda la vida. La finca está en un entorno muy bonito, y lo tienen todo pensado, incluso un plan B por si llovía (aunque estábamos en pleno julio y ola de calor). Además, son muy flexibles con respecto a la disposición del salón, del jardín, etc. Por ejemplo, nosotros no queríamos la caseta del cortador de jamón, ya que preferíamos que se le viese en una mesa, y no nos pusieron ningún problema. También se adaptan a ti con los menús, de tal manera que puedas dejarlos a tu gusto. Mis invitados que tenían alguna intolerancia u opción alimentaria quedaron encantados con la atención que recibieron. Para las que estéis pensando en boda civil, como yo, la ceremonia fue preciosa, te ponen las sillas que quieras, tienen nebulizadores por si hace mucho calor y sombrillas por si aún cae mucho el sol (no fue mi caso, ya que lo hicimos a las 8 de la tarde). Te proporcionan megafonía e hilo musical durante toda la ceremonia y el banquete, además del baile (con el DJ que trabajan no quedamos nada contentos, pero eso va en otra reseña...). En conclusión, fue una boda muy disfrutona y alegre, tal como la queríamos, con profesionales que se vuelcan en que tu día sea el mejor, por lo tanto, os recomiendo que os pongáis en sus manos y confiéis, que aunque no os lo parezca en algunos momentos por los nervios o porque nos cuesta imaginar algo sin haberlo visto, ¡todo saldrá perfecto con ellos! ¡Mil gracias a todo el equipo de La Moraleja, sobretodo a Pili, no te olvidaremos nunca!

Salvando a Pilar, la maître, que es superatenta y profesional, y los camareros que eran majísimos y muy amables, el resto terrible. El día que fuimos con mis suegros a enseñarles el sitio, habíamos quedado con N., el dueño, y nos dio plantón. Tratamos de contactar con él y no hubo manera. No nos devolvió la llamada, ni un simple mensaje para disculparse. Es más, en los 9 meses que hemos pasado organizando la boda, nunca lo hemos vuelto a ver, ni se ha puesto en contacto con nosotros, a pesar de conocer a dos de nuestros familiares. Menos mal que Pilar estaba ahí y nos atendió muy bien.
El día de la boda, cuando los novios llegamos, ya habían servido la mitad del cóctel, a pesar de que dijimos expresamente que cuando los invitados llegasen se sirviese bebida, pero que bajo ningún concepto empezasen a sacar comida hasta que llegásemos nosotros, porque era la parte que más queríamos disfrutar. Hemos sabido después que el jefe estaba en cocina y la orden la dio él. Imaginad nuestro disgusto.
El DJ, que lo ponen ellos, aunque se paga aparte, llegó tarde porque se había ido a un festival. La canción de entrada al banquete la tuvo que poner la wedding. Aunque le habíamos mandado una lista de canciones, cantantes y grupos que nos gustan, no puso ni una. A nosotros nos gusta el rock y el heavy, y él se marcó una sesión de música electrónica que ni en Radikal. Varios invitados se quejaron de que, durante la cena, tuvieron que comer como los pavos, porque sacaron los platos muy rápido. Los alojamientos que tienen allí, que también se pagan aparte, eran un desastre: olían mucho a humedad, no nos pudimos duchar porque no había agua caliente en ninguna casa, y uno de los invitados tuvo que dormir en una banca de la sala porque su cama estaba empapada, ya que el radiador de al lado se salía. Como es de comprender, no recomendamos para nada la Moraleja. En Cuenca hay otros sitios igual de bonitos cuyos propietarios ponen un mimo infinito en procurar que los novios hagan del día más importante de su vida un día memorable. Estamos muy disgustados con el servicio que se nos dio, y si pudiésemos volver atrás, no lo elegiríamos, seguro.

Lo organizado por el salón de bodas... salió a trompicones y con muchas trabas.

Sinceramente no recomiendo El Sitio de La Moraleja (Ctra. Villalba de la Sierra, Cuenca) por mi experiencia. La metre es una profesional y el lugar muy bonito... pero el chef y encargado... por no decir otra cosa, digamos que deja mucho que desear. Simplemente diré que aún después de preparar y celebrar la boda, ni sabemos quién es, ni hemos podido hablar con él por teléfono.

Cada pareja es libre de decidir todo sobre su boda. Pero por evitar disgustos, intentar otro sitio.

Nos casamos el pasado 14 de agosto y lo celebramos aquí. Nuestra primera fecha era para el año anterior, pero debido a la pandemia decidimos posponerla. Además, nuestra primera idea era realizar la boda de tarde, pero las restricciones que había en ese momento nos hicieron cambiarla a mañana. Nacho nos transmitió tranquilidad en todo este proceso, ya que nunca nos metió prisa con la decisión que tomásemos, y nos aconsejó sobre otros muchos aspectos para que todo saliese perfecto. En cuanto a las cosas que queríamos hacer, jamás nos dijeron que no a nada, todo han sido facilidades y un "sí, no os preocupéis" por respuesta. Queremos agradecer a todas las personas que trabajaron para que ese día todo saliese perfecto y, en especial, a Pilar y a Juan, con quiénes estuvimos muy tranquilos desde el primer momento (gracias a ellos tenemos un buen recuerdo de nuestro día). Los invitados nos transmitieron que les encantó el sitio, la comida y la organización, lo pasamos fenomenal. Recomendaríamos sin duda a otros novios.

Espectacular e inmejorable. Gracias a vuestra profesionalidad y ayuda ha sido el mejor día de nuestra vida. Comida de primerísima calidad y un servicio inmejorable. Enhorabuena Nacho y Pilar y a todos los profesionales que allí trabajáis. Boda de 10. Iván y Cris 15/06/2024

Nacho, el dueño, es un restaurador de categoría. Pilar, la Metre, es incansable y con su equipo ofrece el mejor servicio, respondiendo siempre ante cualquier duda. Gracias por las atenciones y los exquisitos platos y tapas ofrecidas. Ha sido un éxito y merecéis la más alta consideración. Os recomendaría siempre.

¡Un gran acierto! Cualquier comentario que escriba se va a quedar corto con el gran servicio que dan, desde el primer día hasta el último. Se han adaptado a todo; cambios de última hora, cambios de fecha, cambios de normativa, cambios de ceremonia… Todo. Y todo con una sonrisa, haciéndonos el día a día más fácil, eliminando obstáculos. En cuanto a gestión, un 10, muchas gracias Nacho. ¿Y el trato personal? Simplemente excepcional. Nos guiaban, se encargaban de gestionar tiempos, regalos a invitados, autobús… Y un largo etcétera. La respuesta ha sido sí a todo cuanto hemos planteado. El entorno es precioso, el salón y el jardín es ideal para la celebración. Para mí, es especialmente bonita la planta alta, en la que me dejaron arreglar, un espacio amplio, con unas cristaleras preciosas desde donde ves la sierra acompañada de un piano de cola. También cuenta con alojamiento para los invitados en unas casas rurales muy nuevas y bien equipadas. En cuanto a la comida… Fantástica, el servicio era rápido y muy atento. Quiero dar las gracias especialmente a Juan y Pili, que estuvieron a mi lado y al de mi familia durante todo el fin de semana, trabajando sin parar y con una sonrisa. Estoy deseando volver allí.

Atención personalizada y trato muy bueno. Comida riquísima. Sin duda alguna el mejor sitio para celebrar un día tan especial.