Celebramos la boda de nuestra hija en el restaurante La Garduña en Alborache. ¡Quedamos encantados con nuestra elección al 100500 por ciento! Tuvimos 60 invitados, pero podemos recomendar este lugar con confianza para bodas de 40 a 90 personas. ¡La relación calidad-precio del evento fue muy razonable!

Para empezar, solo mencionar los paisajes más hermosos de este lugar. El espacio para la ceremonia es colorido, elegante y al mismo tiempo muy acogedor. La organización técnica de la ceremonia (sonido, música) también fue de primera calidad.

Para el cóctel, nos ofrecieron elegir 7 aperitivos de 15, y todos eran inusuales y sabrosos. Para la cena, nos ofrecieron tres menús a elegir; seleccionamos el de precio medio, pero la diferencia de precio era solo de 2-3 euros. ¡La cocina del restaurante es simplemente una obra maestra de la gastronomía!

La magnífica decoración del salón y de las mesas con flores frescas, la vajilla hermosa, los camareros elegantes y corteses, el administrador puntual, todo esto hizo que nuestra cena fuera una verdadera celebración. La selección de bebidas y el trabajo de los bartenders en la Barra libre impresionaron a todos. El restaurante nos ayudó a contratar un discomóvil para la discoteca, con la que acordamos nuestra lista de reproducción deseada.

Queremos destacar y agradecer a todos los responsables del restaurante por la organización de nuestra boda por la comunicación rápida, la retroalimentación oportuna, la ayuda en la resolución de todas las preguntas, los consejos y los contactos.

Otra ventaja indiscutible de este lugar para la celebración de bodas es la posibilidad de alojar a los invitados en los apartamentos Molino Galán (¡hasta 55 personas!), que forman parte del complejo y están ubicados un poco más abajo. Nuestros invitados eran de fuera de la ciudad y aprovechamos esta oferta y también quedamos impresionados con la comodidad del alojamiento.