¡QUE PEDAZO DE BODA!
No es que lo diga yo, que también, pero es lo que nos han transmitido todos nuestros invitados, y esto es gracias, en gran parte a “La Cueva del Fraile” en general. Contar con ellos fue una de las decisiones más importantes y acertadas que hemos hecho. Te ayudan con todo y se adaptan a cualquier cosa que quieras o se te ocurra.

En primer lugar, queremos dar las gracias desde aquí a todo el equipo, camareros, cocineros, gente del hotel… que, capitaneados por Michel, hicieron que el fin de semana de la boda fuera increíble. Todo el equipo se ha adaptado a todas nuestras peticiones, cambios en reservas y habitaciones, cambios en los menús, personalización de platos, inclusión de productos… simplemente formidable.

Nosotros pasamos un gran fin de semana, ya que al tener que desplazar a bastante gente de fuera, contamos también con la parte del hotel, y desde el viernes empezamos a recibir gente, hicimos una preboda muy divertida, nos ayudaron a tener muchos detalles y sorpresas con los invitados.

El sitio es espectacular, en mitad de la naturaleza, cuentan con un montón de espacios diferentes en los que poder realizar diferentes celebraciones o momentos… Hemos explotado al máximo todos los espacios, patio, chill-out, salones, carpa… Tiene un gran mantenimiento, no hace falta mucha decoración, porque ya en si es un espectáculo de localización, pero es que lo están reformando por completo… actualizando todos los espacios y convirtiendo el hotel, en un auténtico resort.

El día de la boda, se encargaron que muchos de los detalles, que hacen que una boda se convierta en inolvidable, estuvieran listos y en su sitio. Desde el cartel de bienvenida, menús especiales, colocar el seatting plan (que era una locura nuestra), nuestra entrada al banquete… TODO.

Con la comida no hubo ningún problema… elegimos un coctel bastante largo, con varios corners, entre ellos el de sushi… la gente se volvió loca y lo terminaron en un abrir y cerrar de ojos, Michel nos ayudó a contratar a un coctelero profesional, tanto para el coctel como para la barra libre (contábamos con opción sin alcohol) … LOS MEJORES MOJITOS QUE HEMOS PROBRADO NUNCA, la gente estaba encantada. Cuando bajamos a cenar a la carpa… la gente ya no podía más, estaban llenos… el menú fue algo más corto, pero con paletilla de cordero… aún nos dan las felicitaciones por cómo estaba… que rico… ojalá volver al 27 de Mayo, y poder revivir todo otra vez.

Con La cueva del fraile no solo contratas el restaurante, la comida, que como decía estuvo impresionante, contratas una experiencia, contratas sentimiento, buen hacer y pasión por lo que hacen.
De verdad, gracias a todos, por hacer de nuestro día algo tan especial. Si nos volvieramos a casar, seríais nuestra opción mil veces más.
Un saludo
Aitor y Paula

Desde que nos prometimos sabíamos que la boda sería en la Cueva del fraile, Michel estuvo es todo momento atento a nosotros, desde cada preparativo hasta ese día, estaba muy tranquila de que nuestra boda ese día estuviera en sus manos.
El lugar es precioso y tienes muchos rincones donde hacer los momentos e incluso las fotos.
La comida fue espectacular, le explicamos a Michel la idea que llevábamos y el supo plasmarlo todo a la perfección, tanto que hasta nosotros nos quedamos sorprendidos ese día con la cantidad de comida que había y lo bueno que estaba todo, incluso los invitados nos dijeron lo bien que habían comido.
A la hora de montar y preparar todo fueron facilidades, nos permitieron ir durante esa semana y nos ayudaron en todo lo que podían, estuvieron atentos desde la mantelería y el menaje hasta de mover mi decoración de sitio cuando yo ya no podía y ofrecían ayuda a todos los proveedores que tuvimos.
El hotel maravilloso, la gente se fue encantada, Eva y Pilar pendientes de que todo estuviera perfecto.
Dar las gracias también a todo el equipo, camareros, a nuestro maître Fernando, cocineros, y mas gente que hay detrás para que todo salga increíble.
Gracias por hacer de nuestra boda un sueño hecho realidad. 💙

Todo fue increible.
El hotel, así como el entorno fue todo perfecto.
Todos los invitados que se hospedaron en el hotel salieron encantados.
Tanto la organización de la boda como el día de la boda fueron geniales.
Cuando estabamos con los preparativos teníamos momentos de crisis porque parecía que nos faltaban muchas cosas por preparar, pero solo con hablar 5 minutos con Michel, el organizador, nos quedabamos super tranquilos, nos transmitió muchísima seguridad desde el primer momento hasta el último, y, por supuesto, el día de la boda fue increible, todo salió rodado, el servicio fue perfecto y la comida increible.
En resumen, lo recomendaría una y otra vez, un 10.

Desde el primer momento que entramos por la puerta sabíamos que habíamos encontrado el lugar para nuestra boda.
El paraje en el que se encuentra, el que cuente con hotel, ya que la mayoría de nuestros invitados eran de fuera y el maravilloso trato que recibimos por parte de Michel nos hizo no dudar.

Michel nos enseño y explicó cada rincón y todo lo que se podía hacer, posilidades del cóctel, nos aconsejo con las cantidades de comida y nos facilitó algún proveedor que luego elegimos como el fotógrafo y las flores.

La comida estaba deliciosa, todo el mundo se quedó encantado tanto con el cóctel como con la comida.

Por parte del hotel otro 10, gracias a Eva y todo su equipo por tratarnos tan bien a nosotros y nuestros invitados, da gusto sentirte como en casa en momentos tan importantes.

Y por supuesto mil gracias a Michel por toda su dedicación, estuvo pendiente de cada detalle y sin él no hubiera sido lo mismo.


Nuestro día fue genial, lo recomiendo al 100%

Solo puedo describirlo como impresionante. El lugar, el servicio y sobretodo el organizador, Michel! Es genial y gracias a el todo salio mejor de lo que esperábamos. No podríamos haber tenido más suerte sin contar con el.
Le recomiendo mil veces a él, el Hotel, el catering y todo lo que tuvimos. Porque el conjunto hizo que fuese un día espectacular.
Gracias a todo el equipo!

Celebramos nuestra boda en la Cueva del Fraile y si tuviéramos que volver a celebrarla, volveríamos con los ojos cerrados. Michel que es la persona que se ocupa de todo no se le escapó nada, super atento, un profesional. Agradecidos con él.

El 14 de octubre celebramos nuestra boda en el Hotel Cueva del Fraile. Fue una boda numerosa y después de ver varios sitios nos decidimos por la cueva.
No pudimos acertar más.
Es un hecho que en Cuenca el cubierto de boda está subiendo mucho. Pero se adaptan a todo, nosotros le pedimos un presupuesto para no superar, y así fue, todo ello sin privarnos de todo lo que no puede faltar en una boda.

Además, Michel nos dio todas las facilidades del mundo. Cómo si lo conociesemos desde siempre. Vive y se preocupa por y para que salga todo bien, todo lo apunta y prevee todas las posibilidades. Ha sido un día increíble. Además Michel está durante todo el día disponible y visible para que los tiempos y el evento siga correctamente su curso.
Los camareros abordaban el cóctel desde diferentes sitios. Hay hueco para música en directo. La entrada se luce muchísimo y hay asientos para los más mayores. La gente comió muy bien y aunque la proporción de gente joven en nuestra boda era alta, no faltó comida. Nos dejamos guiar por Michel en todo. Íbamos a poner más pinchos de los solicitados, pero Michel nos dijo que no iba a ser necesario, y fue un acierto no añadir porque la gente salió casi comida del cóctel.

Si queréis algo concreto para el cóctel lo podéis pedir y renuevan existencias. No cobran por ello porque de una u otra forma le dan salida. Nosotros pedimos vermut porque en las bodas de nuestros entornos se toma mucho, y no faltó.

A la hora de traer externos o contratar cosas dices la palabra boda y todo se encarece, es por ello que preferimos coger todo lo que nos ofertó la cueva, no sin antes comparar ofertas y al final siempre salía mejor la oferta de la gente que trabaja para la cueva. Recomiendo comparar los precios.

Un gran número de invitados puede tener problemas logísticos, pero gracias a los espacios que tiene la cueva y la organización que te proporcionan fue todo perfecto.

Te dan facilidades para pagar, puedes abonarlo todo al día siguiente de la ceremonia.

Estamos muy agradecidos y no cambiamos nada de lo que ocurrió y cómo fue todo. Muchas gracias Michel!! Nos ayudaste a que el mejor día de nuestra vida fuese perfecto, y así fue. Un abrazo!!

Un gran acierto casarnos en hotel Cueva del fraile,desde el minuto 1 hemos estado encantados,Michel,el encargado de organizar las bodas es un gran profesional,muy atento y dispuesto a ayudar en todo momento,sin duda lo volveríamos a elegir.Muy recomendable,y todos los trabajadores unos grandes profesionales.

Estoy totalmente seguro de que celebrar nuestra boda en la Cueva del Fraile ha sido la decisión correcta.
Michel, el encargado de la organización del evento, nos ha asesorado en todos los pasos del proceso. No se ha despegado de nosotros en ningún momento, desde la reunión inicial hasta los días después de la boda, y nos ha asesorado siempre con mucha sinceridad y amabilidad. La comunicación con el no podría haber sido mejor y ha cuidado hasta el más minimo detalle de la organización. Se ha adaptado a todas nuestras peticiones, por raras o especiales que sean, y siempre lo ha hecho con una sonrisa.
El equipo del hotel, desde los camareros hasta el personal de recepción, también se ha portado estupendamente y han tenido mucha paciencia (mención especial para Guillermo, el camarero de la mesa nupcial). Nuestros familiares y amigos se han alojado en el hotel y todos han quedado contentos.
Muchas gracias a Michel y a todo el personal de la Cueva del Fraile por hacer de este día algo tan especial.

Desde el momento que mantuvimos el primer contacto supimos que era nuestro lugar. La profesionalidad, la calidad y lo fácil que te hacen todo es su sello, sobre todo michel. La comida excelente, para chuparse los dedos. Luego el servicio de camareros super profesionales y simpáticos. Decoración perfectísima: como la queríamos, todo tal cuál pedimos. Gracias a ellos sin duda salió todo espectacular. Solo puedo dar mil gracias y no me cansaré nunca de que hicieran nuestro día tan tan tan especial, mágico y espectacular. Vuelvo a repetirlo: michel es lo mejor. Lo recomiendo al 100x100.

Desde el minuto uno tuvimos un trato inmejorable. La profesionalidad, la calidad y lo fácil que te hacen todo. Salió todo espectacular. Solo puedo dar las gracias y no me cansaré nunca. Recomendable al 100%.

¡No podríamos estar más contentos! Celebramos nuestra boda y fenomenal. El servicio de camareros, atentos, profesionales y simpáticos. Decoración perfecta, comida de 10, muchísimo más buena que el día de la prueba. Miguel, un encanto, hizo posible desde el primer momento que nuestro día fuera especial. Son atentos, superflexibles... Solo podemos tener buenas palabras.

Muy profesionales, muy atentos, flexibles, amables y diligentes. La celebración ha sido todo un éxito, la comida muy buena, la organización perfecta. Miguel Ángel y su equipo los mejores, a ellos le debemos que todo haya salido tan bien. Un millón de gracias por vuestra profesionalidad y vuestro cariño, no hemos podido elegir mejor.

Sinceramente no puedo decir nada malo. Nos casamos el sábado haciendo allí todo, ceremonia civil y banquete. Extraordinarios profesionales, camareros atentos y cercanos y en especial la figura de Miguel Ángel Monserrat responsable de eventos que siempre está pendiente y cuidando para que todo salga como tiene que salir.

Un entorno de ensueño para disfrutar en una ciudad como cuenca, patrimonio de la humanidad. Poder dormir en un hotel rodeado de naturaleza y disfrutar de un ambiente relajante, con un patio central es un añadido para los invitados. Me gusta tenerlo todo controlado y el equipo de profesionales ha respondido perfectamente.

Qué podría decir, hicieron de mi boda un día inolvidable. Michel y Eva, os daría las gracias desde cualquier parte. Son increíbles, atentos, anotan y registran todas tus peticiones y consiguen lo incalculable. Comida con el nuevo cocinero riquísima, con una presentación excelente. Carpa abierta ideal para estas circunstancias, no dudaría en repetir una y mil veces.