Opiniones de Hacienda Torre de Las Arcas

Celebramos nuestra boda este finde de semana y no podemos estar más contentos con el resultado. Hacienda increíble y trato magnífico por parte de Rocío y su equipo. Todos los invitados quedaron encantados con los distintos espacios. Recomendada al 100%

Un lugar para soñar, sabíamos desde el primer momento que vimos la hacienda Torre de las Arcas que íbamos a celebrar allí nuestra boda y no nos confundimos. Es tan bonita, sus exteriores, su salón tan grande y su molino donde realizamos la barra libre pero más bonita aún la hace Rocio, gracias por cuidar cada detalle por tu cercanía y por ponérnoslo todo tan fácil.
No pude elegir mejor hacienda, volvería a repetir una y otra vez más. Estaré eternamente agradecida ☺️

Desde que visitamos la hacienda nos enamoramos del lugar, su estética, su historia, sus espacios con 1000 posibilidades hizo de Torre de las Arcas un lugar espectacular para celebrar nuestras boda.
Agradecer también el trato recibido por el personal de la hacienda.

Fue nuestra mejor elección y no podemos estar más felices. La Hacienda es preciosa y cómoda para todos los invitados ya que tiene cada rincón a mano. Esta muy cuidada y estamos encantados. Agradecer en especial a Rocío que nos ayudó y tranquilizó en todo momento, su ayuda y predisposición fue magnífica. Muchísimas gracias!

La hacienda cumple con todos los requisitos que yo quería para el día, además de ser preciosa es espaciosa, bien cuidada, las distribuciones permitían que se llevara a cabo la recepción, en el patio, el almuerzo en el salón y la barra libre en el molino, y todo esto sin ver la logística interna de camareros, platos, coches de carga y descarga. Nada. Super bien. Gracias Rocío por el trato recibido y sin duda la recomendaría al 💯

Celebramos nuestro Convite de bodas y no pudo ir mejor. Todos nuestros invitados quedaron muy contentos con la hacienda. Gran atención y servicio, buena organización, de fácil acceso y muy bonito, con flexibilidad y varias opciones tanto para si hace buen día como para lluvia. Muy recomendado

Nos casamos el 27 abril y quedamos muy contentos, tienen gran ubicación cerca de la A49 lo que hizo que llegáramos con facilidad y sin retenciones, el jardín para el aperitivo es precioso incluso utilizamos sus flores naturales para el fotomatón y pudimos hacernos las fotos en su museo antiguo, esto hizo que no se retrasara nada y pudimos estar con los invitados en apenas unos minutos de aperitivos comenzados, el salón es amplio y el aire acondicionado estuvo en todo momento con temperatura perfecta, y lo más importante de todo para mi opinión si te casas en meses de posible lluvia y para no amargarte el momento… Tienen Plan B y pueden sobre la marcha hacer aperitivos en zona cubierta, a nosotros no nos hizo falta estuvimos a punto… recomiendo tener esto muy en cuenta, ese punto fue importante para elegir esta hacienda entre otros muchos!! Gracias a Rocío por ayudarnos en todo momento y recibirnos siempre que lo necesitamos, no dudéis en elegir esta hacienda porque conozco muchas y como esta hay muy pocas!!

Torre de las Arcas fue nuestra mejor elección para celebrar nuestro maravilloso día.
Está cuidada al milímetro. Cada rincón de la hacienda es precioso. No pudimos elegir mejor.
Y en cuanto a la gestión, Rocío, es encantadora.

No os vamos a negar que nos habría encantado que no lloviera el día de nuestra boda para poder haber celebrado la ceremonia civil en los jardines, que son preciosos, pero como con el tiempo nunca se sabe cómo va a salir la cosa, tuvimos que celebrar la ceremonia dentro del salón. Tanto el catering las torres como ellos no pusieron ninguna pega de que fuera así, y a día de hoy recuerdo el día de nuestra boda como un día precioso. Todo se decoró adecuadamente y el salón estaba espectacular. La atención de Rocío (comercial) fue excelente y nos ayudó en lo que pudo. El día de nuestra boda no pudo estar por motivos personales, pero es encantadora y me consta que se implica muchísimo con los novios. Si tienes dudas viendo las fotos de la hacienda, ve a verla, porque nosotros en cuanto entramos, supimos que teníamos que casarnos allí. La barra libre en la sala del molino fue brutal.