Opiniones de Hacienda de Anzo

Teníamos claro desde hacía mucho tiempo que nuestra boda tenía que ser aquí. Nos encanta la Hacienda, nos encantan sus jardines y sobre todo su joya: la cueva. Gracias a Lidia también por su trato tan cercano.

El haber celebrado nuestra boda ahí fue un sueño.
Es un lugar precioso, lo recomendamos al 100%. Además, añadir la buena atención de Lidia, siempre te intenta ayudar en todo lo que puede y es muy amable.

Habíamos visto alguna fotos de la Hacienda y decidimos ponernos en contacto con Lidia para ver si ese era el lugar que queríamos para nuestra boda. Nunca imaginamos que era mejor de lo que pudiéramos ver en las fotos. Fue pedir ver Anzo y salir de allí con el contrato firmado.

La hacienda de Anzo es un paraje precioso dividido en dos espacios, en uno estas al lado de una piscina rodeada de césped y jardines, donde tienes un hermoso remo. Este fue el elegido para hacer la ceremonia y el cóctel de bienvenida a la boda. el otro espacio es un cueva enorme, con un acceso para los novios , que lo hace más espectacular; y con una charca con una pequeña cascada que hace que sea todo muy hermoso. Aquí hicimos la celebración entera, desde la cena hasta la fiesta.

A parte de estos espacios, la Hacienda dispone de un Hotel. Lugar donde nosotros nos preparamos para el evento y nos quedamos esa noche. Las vistas desde las habitaciones son preciosas, la cama muy cómoda y la estancia en sí muy acogedora. Un lugar maravilloso donde poder estar.

Lidia es una gran anfitriona, muy cariñosa y dedicada. Se preocupa porque todo salga perfecto. El lugar es hermoso, bastante económico y no tiene exclusividad de catering.

Muchas gracias Lidia por brindarnos tu maravillosa propiedad y por ser tan atenta con nosotros.

Este sábado 14 de octubre mi marido y yo contrajimos matrimonio en este encantador lugar.
Los jardines y la cueva de Anzo son dos escenarios ideales para vivir ese día tan solado por los futuros novios/as.
El trato de Lidia fue magnífico. Siempre muy atenta en todo y dispuesta para que todo saliera según lo esperado y mejor.

Desde que vi por primera vez la Hacienda de Anzo sabía que me casaría ahí. Cuando la visitamos por primera vez, no tuve ninguna duda. El sitio es espectacular y Lidia es maravillosa. Fue muy atenta con nosotros durante los meses previos ayudándonos en todo.

Lugar idílico para celebrar cualquier evento. Nosotros nos decidimos por la finca en cuanto vimos la cueva, de la cual nos enamoramos. Tiene todas las comodidades necesarias para organizar tu evento.
Además de la cueva, tiene una zona de césped para otro momento de tu celebración, nosotros la usamos para el coctel.
Remarcamos la tranquilidad del lugar y la zona de aparcamiento de la que dispone, así como la amplitud de los baños y la existencia del baño para discapacitados en una zona de fácil acceso.

Tanto los jardines como la cueva fueron el enclave perfecto para celebrar el gran día, es un lugar muy especial y que asombra a todo el que no lo ha visto. Gracias Lidia por cuidarnos y abrirnos las puertas del Hotel para celebrar nuestra boda.

Con respecto a la hacienda y a los trabajadores de esta misma, ninguna queja al respecto, pero si es verdad que me llevo un mal sabor de boca al no haber cumplido con algunos puntos que nos dijeron que harían y que finalmente no se hicieron.. también un dato importante fue que en medio de la comida nos dijeron que teníamos ir a recoger nuestras cosas de la habitación, que nos habían dejado para prepararnos y cuando volvimos para comer, nuestra mesa ya había terminado de comer y nuestros platos estaban encima de la mesa fríos, a parte de dejar nuestras cosas al lado de las sillas donde estábamos sentadas.

La Hacienda de Anzo es un lugar mágico. Desde que vimos las fotos en la web quisimos ir a verlo pero una vez que estuvimos allí, dentro de esa cueva, supimos que ese era el lugar perfecto para celebrar nuestra boda. La primera visita fue fugaz con la gran jardinera que trabaja allí, nos enseñó todo y nos explicó la historia. Ella es la que se encarga de estar hasta el final de la boda, una crack!
Sin embargo, tuvimos algunos pequeños problemas, de esos que te hacen perder un poquito la ilusión. Después de algunas reuniones con Lidia (la dueña) y algunos otros cambios con otros proveedores, pudimos llegar a un acuerdo.
Lo dicho, pese a todo, es el lugar perfecto para celebrar la boda.

Lo volvería a elegir sin duda. El sitio es precioso y todo fue maravilloso. Se adaptaron a todos los cambios que tuvimos que hacer en su tiempo por el covid.