Opiniones de Finca Soto de Bruil

En nuestro caso elegimos esta finca por el entorno, su casa con historia y por el catering con el que trabaja esta finca. La finca está llena de rincones con encanto y ofrece distintas opciones en caso de que salga un mal día. Los jardines exteriores en los que se puede celebrar la ceremonia están muy cuidados y los dejan a punto siempre antes de cada boda.
Por otra parte, Fernando (el Metre de la finca), es muy cercano y está siempre pendiente de que funcione todo bien, lo que aporta una gran tranquilidad para un día en el que quieres que todo salga bien. Escuchó todas nuestras sugerencias e hizo todo lo que estuvo en su mano para cumplir con nuestras demandas.
Cristina (la dueña de la finca) siempre fue muy atenta con nosotros.

Sin lugar a dudas, los volveríamos a escoger para celebrar nuestra BODA!!

Sin duda la mejor elección. Lo volveríamos a elegir una y mil veces! Un sitio precioso y súper especial. Y la dueña un encanto.
A los invitados también les encantó!

Hacen magia ….. la finca es una maravilla, y Cristina la dueña es una excelente persona. Hace lo imposible para que salga todo mejor aún si cabe !!!!……. Y con la ayuda de Fernando y Rebeca…. No me hubiera casado en otro sitio !!!!!…..

Nos casamos allí este Junio y fue nuestra mejor elección. La finca es preciosa tanto su exterior como su interior, tiene un encanto que pocas fincas tienen. La comida es espectacular, todos los invitados quedaron encantados.
Sin duda volveríamos a elegir Soto de Bruil una y mil veces más!

Somos una pareja que nos casamos el pasado 15 de Abril. Sin duda, totalmente recomendable!! El salón del banquete es de estilo rústico, decorado con antigüedades del marqués de Bruil, muy diferente a cualquier construcción prefabricada de otras fincas, es muy bonito!! En la Casa de los Herederos nos hicimos la sesión de fotos y quedaron fenomenal, merece la pena su alquiler. El catering es de Maher, en nuestra opinión uno de los mejores. La dueña de la finca, Cristina, es encantadora, un placer contactar con ella. No lo dudamos al elegir la finca Soto de Bruil y ahora, sin duda, repetiríamos!!

Nos casamos allí el 29 de Abril de 2023 y la verdad que no podemos estar más encantados de haberlo celebrado allí. El catering y servicio espectacular y la finca idílica. No hay fincas como esa en Zaragoza.

Celebramos allí nuestra boda en abril y fue todo perfecto. Fernando estuvo muy atento a todo y la comida y el servicio fueron de 10. A los invitados les encantó la finca y la historia que tiene. Cristina nos hizo sentir como en casa. Volveríamos a elegir esta finca sin dudarlo.

El sitio es espectacular, lo tienen todo muy bien cuidado y decorado.
El catering es increible, tanto en calidad como cantidad.
Nos ayudaron en todo lo que quisimos sin poner problemas a ninguna de nuestras ideas.
El día de la boda está todo perfectamente sincronizado y no se les escapa ningún detalle, por lo que no te tienes que preocupar de nada más que de disfrutar.
Sin lugar a duda repetiría!!

Una finca preciosa. Llamamos porque nos hacía ilusión casarnos y juntar a toda la familia y amigos, y justamente se había quedado libre el día 23 de julio, el mismo día que cumplíamos 10 años juntos, ¡esto tenía que ser una señal!. En un día decidimos dar el paso y en seis meses preparamos uno de los días más bonitos y que con más cariño recordamos. Los invitados quedaron maravillados con la finca y...¡aun más si es posible con el menú!. ¡Que gran acierto de sitio!

Sin duda es la finca más bonita y acogedora de Zaragoza. Esta todo decorado con mucho gusto y detalle, cada rincón es mágico. Desde la entrada por el camino de cipreses viendo la fachada de la majestuosa casa, el jardín exterior lleno de árboles centenarios, el jardín interior celebrando el cocktail más ideal, el precioso salón interior decorado con un estilo rústico maravilloso y la pista de baile exterior con su porche de madera y muchos más espacios acogedores. Cada zona es especial y gracias a Cristina, propietaria de la finca y Fernando de Mahercatering, la boda fue perfecta. Se implican muchísimo y te ayudan en todo lo posible para que tengas un día inigualable. Nos dieron todas las facilidades para realizar lo que necesitábamos, photocall con unas luces de Neón, colocamos un escenario para que el grupo pudiera tocar en la fiesta, rinconcito para ponerse los cubre tacones, puestecitos de todo tipo… Y qué decir de la comida, sencillamente increíble. Desde el aperitivo, con mucha cantidad de tapas variadas y riquísimas y menú de lo más delicioso.
En conclusión, no pudimos estar más tranquilos de dejar nuestra boda en manos de Cristina y Fernando que hicieron que el día en Soto de Bruil fuese el mejor día de nuestras vidas.