En pleno campo y con un decorado natural espectacular El Carrizal ofrece muchas posibilidades para celebrar con elegancia una boda tan singular como la suya. El personal les atenderá con mucho gusto y les proporcionará información, ideas y presupuestos sin ningún compromiso. Cuentan, sin duda, con los servicios y la experiencia necesaria para personalizar su evento y convertirlo en un recuerdo inolvidable.

Espacio y capacidades

La finca dispone de varios espacios donde realizar la celebración y adaptarla a su medida. El patio y los porches son los espacios perfectos para un ambiente tranquilo y agradable con una capacidad para 250 personas. Si desean un lugar más íntimo también dispone de un salón con capacidad para 120 personas y finalemente para un ambiente más festivo disponen también de un ruedo y una plaza con capacidad para 450 personas.

Las instalaciones están completamente renovadas y dotadas de equipos profesionales de audio (mesa de mezclas, altavoces, hilo musical) y video (proyectores y pantalla gigante) para cubrir todas las necesidades y convertir su evento en el día más especial de su vida.

Servicios que ofrece

La finca dispone de un servicio de catering con una oferta variada de menús, también dispone de otros servicios como una decoración personalizada: decoración floral y los centros de mesa, la mantelería, vajilla, cristalería, cubertería y bajoplatos. Además tienen una oferta muy completa de servicios auxiliares: camareros y cocina, guardarropa, aparca coches y personal de seguridad.

Otros servicios

Se organizan todo tipo de eventos para responder a sus necesidades: convenciones, reuniones de empresa, formación, ruedas de prensa, presentaciones, conciertos, fiestas privadas, (eventos, celebraciones, despedidas de solteros, cocktails, comidas, cenas, entre muchos más.

Localización

La zona donde está situada la finca ofrece la posibilidad de visitar lugares con encanto cargados de historia y valor artístico, además de valor medioambiental. Conozca el Parque Natural de las Lagunas de Ruidera, un paraje mágico de belleza salvaje, afortunadamente preservado.