Confíamos en el Laurel para el día de nuestra boda y menos mal!!! Desde el principio se pudo ver su atencion al detalle y el deseo de que todo saliera como nosotros, los novios queríamos. En la preparación para la boda, pudimos tener varias reuniones con ellos para ver como podíamos organizar ese gran día y poco a poco iba todo cogiendo sentido. Llegamos a cerrar el menu e itinerario del día. Todo con una flexibilidad increible. El montaje de la boda fue espectacular, lo montaron en apenas 4 horas y eso que eramos unos 325 invitados! Ellos directamente se pusieron en contacto con la finca y todo lo gestionaron con ellos, a nosotros nos iban informando pero no nos tuvimos que encargar de nada! El día de la boda fue espectacular, estaba todo montado increible, precioso, tal y como habíamos hablado en nuestras reuniones, no se les escapo nada. Esque es una tranquilidad saber que puede hacee un evento de esta dimensión y que todo va a estar exactamente como has pedido que este, eso no pasa cuando los eventos son tan grandes. Tras la boda, fue de lo más comentado lo rico y especial que estaba todo y por supuesto el servicio. Gente muy educada, con experiencia y que siempre siempre dicen a todo que si con una sonrisa. Los maitres que atendieron nuestra boda estuvieron muy pendientes de nosotros y de ir confirmando todo en directo, lo que mas nos iba apeteciendo. Estuvimos super agusto, muy muy bien atendidos, con un cariño especial. En resumen nuestra experiencia ha sido un 10 con ellos, lo volvería hacer una y mil veces y contaremos con ellos si en un futuro queremos celebrar algo a lo grande. Muchisisismas gracias por hacer de ese dia el mejor de nuestra vida!!!!!!!!!!

El trato de Cari todo el tiempo previo a la boda fue impecable, respondía super rápido, siempre amable y dispuesta a ayudar. La comida nos encantó tanto a nosotros como a nuestros invitados y era muy abundante. Los camareros de 10, eran jóvenes pero super profesionales, nuestros invitados también nos remarcaron que el servicio fue maravilloso. No tenemos más que palabras de agradecimiento para todo el equipo de Laurel Catering.

Que sea la mejor boda en la que hemos estado dicho por nosotros, los novios, es obvio. Desde el primer momento Cari y el resto del equipo hicieron de este viaje no solo un camino fácil sino ilusionante. Trabajan con mucha profesionalidad, te guían en cada paso, tienen un gusto exquisito y mucha empatía. Las opciones de personalización que ofrecen hicieron que con un par de detalles la boda de por sí ya fuera preciosa. Después de la prueba de menú estábamos deseando casarnos y comer ese festín! Nos decían que ese día no comeríamos pero con ese cóctel y menú tan ricos, como no!. El día mismo de la boda tanto el encargado como los camareros hicieron que todos nos sintiéramos atendidos y confortables. Y si bien que digamos nosotros que es l mejor boda en la que hemos estado es obvio, que lo digan la mayoría de los invitados y con una clara sinceridad dice mucho de cómo fue. Que vengan a decirte lo bien que se lo han pasado, que han comido, lo bonito que era todo te hace sentir no solo tranquilidad y alegría sino también mucho orgullo. La mejor decisión que pudimos tomar sin duda fue elegir El Laurel ❤️

Desde el primer momento que vimos el sitio sabíamos que era donde podríamos celebrar la boda de nuestros sueños.
Nosotros quedamos encantados y los invitados aún más.
Muchísimas gracias tanto al Laurel como a Teresa del Esquileo, nos sentimos como en casa

Es un lugar unico para un dia tan especial. La luz, los espacios son muy acogedores y el ambiente es difere Al resto de sitios que visitamos

Nos casamos en el Esquileo con el catering el laurel.
La finca es preciosa, indescriptible, mucho más bonita que en fotos. Tiene un encanto especial cuando llegas, ese salón... Cada rincón es mágico y cuenta una historia. A destacar la atención de Teresa allí en la finca desde el principio hasta el final, hizo que nos sintiésemos como en casa. Una boda de ensueño en un sitio de cuento.

La casa de Esquileo reunía todo lo que queríamos: una zona de jardín exterior y una preciosa nave grande donde poder celebrar tanto el banquete como la fiesta. Nos pareció un sitio increíble, mágico y con historia. La ceremonia la celebramos en la pequeña iglesia del pueblo, a tan solo 100 metros, por lo que todo ese día fue muy cómodo. Pasamos la noche allí (solo tienen una habitación para los novios, donde también me pude arreglar por la mañana) y al día siguiente celebramos un brunch para todos los invitados que se habían desplazado hasta la zona y habían dormido por los alrededores. Para rematar, los dueños de la casa nos hicieron una visita guiada a todos los invitados que quisieron asistir. No me imagino nuestra boda de ninguna otra manera, y en ningún otro sitio mejor. Muchas gracias de corazón.

El Laurel ha sido un catering perfecto para nuestra boda. Todos los invitados recalcaron lo buenos que estaban todos lo platos. El trato recibido por Elena durante toda la organizacion tanto el trato recibido por el equipo el dia de la boda (en especial a Paco) ha sido super cercano, agradable y perfecto. Elena ha sido siempre super flexible buscando soluciones a todo, incluida la lluvia de ultima hora. Mil gracias al Laurel por el dia que nos regalaron. Esperamos verlos en muchas mas bodas, se que de la nuedtra saldran unas cuantas por lo bien que salio todo.

Un lugar acogedor y diferente, perfecto para una boda de unos 150 invitados.