La boda de Yolanda y Jose Antonio en Canor, Alicante
Elegantes Verano Rosa 3 profesionales
Y&J
30 Ago, 2014El día de nuestra boda
Nos levantamos con nuestras niñas, luego él se marchó con mi padre y yo fui en busca de su prendido para cuando nos encontrásemos en casa de mis padres dárselo y que se fuese a casa de mis suegros que es desde donde él saldría. Le entregué su prendido y nos despedimos con un beso y un “no llegues tarde, a las 19:30 tenemos una cita”.
Me puse manos a la obra, terminar de ultimar la ropa de mis hijas, que eran mis damitas de honor, y colocar cada cosa en su sitio para cuando llegase la fotógrafa y no olvidar nada. Fui a limpiar y decorar la puerta por la que saldría del brazo de mi padre y cuando me quise dar cuenta ya era hora de irme a la peluquería. Seguía tan tranquila como si de un día cualquiera se tratase y creo que fue por eso por lo que disfruté tanto cada segundo de mi gran día. Peinaron a mi hija mayor, luego a mi madre y por último a mí.
Llegamos a casa de mis padres comimos y sonó el timbre, era la maquilladora, mientras pintaba a mi madre me duché y me puse mi bata blanca, bueno ahora es mía, pero es la misma que utilizó mi madre y la que espero que algún día utilicen mus hijas. Vestí a mi hija pequeña y mientras me maquillaban a mí se vistió mi hija mayor.
Seguir leyendo »Llegó la fotógrafa y algunos familiares y amigas y con ellos mis primeros nervios. Seguía bastante tranquila hasta que fuimos a vestirme y terminaron de llegar todas mis amigas y con ellas mis primeras lágrimas de emoción. Salí ya de blanco al salón a saludar al resto de familiares y empezó mi salida del brazo de mi padre. Estaba todo el mundo fuera, y justo llegó mi hermano con el coche que me llevaría hasta el hombre de mi vida.
Empezó el trayecto más largo que me ha parecido nunca, pero me reí muchísimo con mi hermano, mi padre y mis niñas en el coche. Era un coche antiguo precioso, un Mercedes Ponton.
Por fin llegué a Salones Canor. Me retocaron el maquillaje antes de bajar del coche y se acercó el maître a darnos las instrucciones de mi entrada al altar. Mi ahora ya marido me esperaba de rosa por una broma que empezó mi hija mayor. Él no estaba muy convencido porque dice que la tradición es que la novia fuese de blanco y no de color pero que si era lo que me gustaba a mí a él también. Nunca olvidaré mi cara al verlo, pero menos olvidaré la suya cuando me vio aparecer vestida de blanco, le fue imposible contener las lágrimas.
Fue una ceremonia muy corta pero muy emotiva, la oficiaron mi hermano y un amigo mío desde la infancia que es concejal. Leyó un buen amigo nuestro y mi hija mayor con la que nadie se libró de llorar. Nos dedicó unas palabras preciosas que nunca olvidaré. Luego leyeron la ceremonia de la rosa y por fin llegó el deseado sí quiero, creo que lo más bonito que he oído nunca fue “os declaro marido y mujer”. Nos besamos, brindamos ante todos nuestros seres queridos. Salimos por el pasillo siendo ya uno.
Empezó el cóctel de bienvenida en el jardín y las fotos para el recuerdo con familiares y amigos. La entrada al salón fue realmente emotiva, sonó la canción de Il Divo “Hasta mi final”. Sirvieron un entrante individual para cada comensal; esfera dorada de foie de pato, concha de ensalada de pulpo fría y endivia rellena de queso cremoso. Seguidamente sacaron el pescado; bacalao fresco con tallarines de calamar, nada más terminar el pescado sonó la canción que se llama “Amistad” de Beatriz Luengo e hice la entrega del ramo de novia a una de mis mejores amigas que se casa el año que viene. Seguidamente sirvieron los sorbetes era un tricolor de tres frutas. Sirvieron la carne; solomillo ibérico con salsa toffee, nada más terminar el plato sonó la canción de “Mamá” de Il Divo en español e hicimos la entrega de ramos a las madres. Sirvieron los postres, conos de chocolate rellenos de mousse, brocheta de fruta y helado, sonó la canción de “Palabras para Paula”, una canción preciosa de la Oreja de Van Gogh que habla de los hijos y les dimos un regalo a nuestras niñas.
El corte de la tarta fue súper romántico, con la canción de Aladín de Bustamante y Gisela. Y como no, nuestro baile, creo que fue uno de esos momentos que no olvidas nunca, bailamos una bachata de Daniel Santacruz, “Bailando contigo”. Luego intercambiamos de pareja, me cogió mi padre y fue un momento súper especial. Estuvimos disfrutando de nuestro día y nuestra gente hasta casi el amanecer. No cambiaría nada de mi día, fue perfecto, rodeados de nuestra gente íntima que fueron los que hicieron que todo fuera así de especial.
Servicios y Profesionales de la Boda de Yolanda y Jose Antonio


Otros Proveedores
Otras bodas en Alicante
Ver todas
Inspírate con estas bodas
4 comentarios
Deja tu comentario