La boda de Seb y Maria en Riudecolls, Tarragona

De mientras, los invitados llegaban y se encontraron unas tarjetas de “bienvenidos” con mensajes personalizados que estaban colgados en los árboles del camino de entrada a l’Avellana. Todo un detallazo para agradecerles su presencia.

Toda la finca estaba decorada a modo jungla, puesto que allí fue nuestra pedida de mano. Katinka, Massimo (de l’Avellana) junto con Javier (The fucking flower shop) idearon esta “deco” supercañera e incluso montaron una mini jungla dentro de la masía para el sitting de los invitados. ¡Espectacular!

Nuestra ceremonia fue única puesto que pedimos a nuestros amigos que la organizaran… Y montaron un teatrillo superguay y representaron nuestra historia, la gente se rio a carcajada limpia. Además, fue una super idea de su parte puesto que nuestros invitados venían de diferentes partes del mundo y así todos entendieron lo que se representaba. Y para acabarla, decidimos hacer la ceremonia de la arena (con arenas de diferentes colores) y votos. Fue muy emotivo.

Las fotos postceremonia nos dieron un mini respiro a tanta emoción, pero no hicimos muchas tampoco porque queríamos aprovechar al máximo el tiempo con nuestros invitados… Así que fuimos para el super aperitivo de Mallol protagonizado por su famoso Gin… ¡Sin palabras! Durante el aperitivo había un árbol con fotos divertidas de nosotros y nuestros invitados que fue todo un suceso.

Y después del aperitivo… ¡El banquete! Nosotros decidimos intercalar entre plato y plato entrega de diferentes regalos para no hacerlo todo de golpe: para los padres, para los futuros novios (fui yo que hice en crochet una pareja de novios que se les parecía) y el ramo de la novia. Además, decidimos no hacer tarta de boda y en su lugar, tuvimos un buffet de postres y los servimos nosotros. Fue también genial como momento y muy divertido ver la cara de los invitados al principio cuando no entendían nada. Los detallitos para los invitados los hice yo, de crochet, e iban en acuerdo con la decoración de la finca: eran llaveros con diferentes hojas de la jungla.

Tuvimos mil sorpresas y regalitos por parte de los invitados, incluido un vídeo bailando Backstreet Boys… ¡Y dimos paso al baile! Cambiando de espacio, nuestro primer baile fue en la era de l’Avellana con lucecitas que nos recuerdan a las verbenas. Además, compramos bengalas XL que encendieron justo antes de empezar el baile y el efecto quedó precioso. Nos decidimos por la canción de Lady Gaga ‘Always remember us this way’ cortada por el medio y seguida de ‘Physical’ de Dua Lipa con coreografía (simple) que nos inventamos. ¡Nos encantó el rato que pasamos juntos pensando la coreo! ¡Y nada, después seguido de super baile donde la gente lo dio todo! La última sorpresa de la noche fue el resopón de la mano de Mallol con pizzas, hamburguesas… ¡Qué exitazo!

El día fue, como lo anunciaba al principio: espectacular. Mejor de lo que esperábamos y el sentimiento de estar sobre las nubes aún dura cuando lo recordamos.