La boda de Raymond y Sandra en Valladolid, Valladolid

El día de nuestra boda

Desde el día que decides casarte: Preparativos, preparativos y más preparativos. Buscar proveedores, organizar sorpresas, organizar vestidos, ropa, invitados, transporte. Pero merece la pena. Es mucho lío pero el recuerdo, impresionante.

No dejes de mirar en bodas.net, mirar en tiendas, preguntar a gente, amigos y conocidos. Es un día muy especial y no merece la pena escatimar en nada. Peluquería, maquillaje y vestido, así empieza el día de tu boda pero eso no es todo, nervios cuando te acercas al novio y a los invitados y las caras de la gente. Atentos a los invitados, eso no se te olvidará nunca, tus amigos llorando, fotos, caras, impresiones.

Olvídate de todo, disfruta y estate atento a todo lo que venga porque merecerá la pena acordarse de todo. En el coche, en la iglesia, en el banquete y el baile. Es el día más especial de tu vida y si eliges bien, con la persona más especial con la que te puedas llegar a cruzar.

Al final todo importa, banquete, anillos, vestidos, invitados, detalles, pero no hay que olvidar que lo mejor es disfrutarlo y vivirlo. Yo tengo el recuerdo más especial que os podáis imaginar, desde las 7 de la mañana hasta las 2 de la mañana del día siguiente.