La boda de Raul y Paola en Colmenar De Oreja, Madrid

El día de nuestra boda

Empezó mi día temprano a las 9. Montamos las cosas en el coche, recogí a mis suegros y a mi hermana y fuimos a por las flores para los ramos que yo iba a montar para mis damas y para mí, claro. Llegamos a la finca sobre las 2 de la tarde, me preparé y preparé los ramos y la ceremonia empezaba a las 7 y media, así que íbamos con tiempo. Una de mis mejores amigas vino a prepararme y me dejó guapísima. Mientras tanto, el novio estaba organizando el catering y comprobando que todo estuviera tal cual lo habíamos pedido, la finca quedó preciosa. Luego llegaron los fotógrafos e hicieron un trabajo espectacular. Nos hicieron fotos en las habitaciones por separado. Todo marchaba sobre la hora, pero tenía que empezar la ceremonia y no había llegado mi tío y no podía bajar si él no estaba, así que al final me hice esperar...

La ceremonia empezó con media hora de retraso, pero al final quedó espectacular porque empezó atardecer, así que las fotos y los videos quedaron superbién. La ceremonia era simbólica, prepararon el ritual de la arena y nos casó un buen amigo que lo hizo superbién. Sin él no hubiera sido posible. ¡Hicimos votos personalizados y la verdad es que todo el mundo se emocionó porque no se lo esperaban y por fin dimos el sí, quiero! Los fotógrafos nos hicieron un reportaje que quedó increíble con todos los detalles de la finca. Al subir al jardín los invitados estaban listos para recibirnos con el brindis y empezó el convite, nuestro catering era de pie tipo cóctel con corners de comida. ¡Toda mi familia es latina, como nosotros, así que nos sorprendió que prefirieron empezar a bailar! Todos estaban con una energía increíble, había mucha buena vibra y eso nos encantó. Mientras unos bailaban otros comían, fue un poco loco.