La boda de Pepe y Nagore en Errenteria, Guipúzcoa
Elegantes Verano Morado 4 profesionales
El 06/09/2014 1.829 1 9
P&N
06 Sep, 2014
El día de nuestra boda
Diecisiete meses antes comenzó todo, 518 días nada más y nada menos. Fue entonces cuando decidimos casarnos y pensamos que sería una bonita manera de celebrar 10 años de pareja de hecho y un hijo de 5 en común.
Es gracioso ver como una idea inicial, sencilla y básica termina convirtiéndose en todo lo contrario, resultando ser algo muy bonito y lleno de detalles. Nosotros, al igual que muchas parejas, también pensamos, juramos y perjuramos que nuestra boda "solo sería firmar y listo" ¡Ya!, eso pensábamos, aunque la verdad es que lo mejor que hemos podido hacer, dejarnos llevar pues ha sido un día precioso. Eso sí, nos mantuvimos firmes en eso de que nuestra boda sería íntima y civil.
La verdad es que no hemos pasado muchos nervios, ni siquiera el día de la boda y las manualidades que hicimos para personalizar nuestro día han ayudado muchísimo a hacer más llevaderos esos 17 meses.
Ese día, aunque no estuve nerviosa, me emocioné mucho al ver a mi marido vestido de novio, con él, nuestro hijo Kimetz, esperándome en el salón ¡qué guapos estaban! La verdad es que en general sorprendimos a los invitados con nuestra boda, con pequeñas cosas como hacer las fotos antes de la ceremonia, aparecer los tres juntos en nuestro coche conduciendo el novio, él fue quien me ayudó a bajar del coche, o con los detalles que se repartieron a la entrada del Ayuntamiento.
Seguir leyendo »Una bonita sorpresa fue encontrarnos dos novias de bodas.net en el mismo día y lugar de ceremonia, ya os conté en un debate anterior lo emocionante y bonito que fue vernos vestidas de novia, sorprendiendo a nuestros respectivos invitados y vivir ese momento de cogerte las capas falda del vestido saliendo pitando a saludar a Miren, que estaba preciosa.
En la ceremonia, mi amiga y escritora Dolores Redondo no dedicó unas preciosas palabras. Yo leí un poema de Martin Gray (Amar es querer la felicidad del otro). Otra amiga, Naiara, nos bailó a la salida un Aurrezku. Y podría seguir y seguir contando y no parar pues es un día que cada momento es único y maravilloso.
Fue una boda como os comentaba íntima, 39 invitados niños incluidos, personalizada desde la decoración a el menú y a los invitados les gustó mucho tener esa sensación de estar como en casa. Tiré el ramo a las solteras y fue súper divertido. Nuestro hijo Kimetz disfrutó muchísimo y no paraba de gritar "¡vivan los novios!" estaba muy gracioso, nos ayudó a repartir los detalles a los invitados.
Tuvimos un momento genial antes de ir al restaurante que paramos en un bar a tomar algo solo con la fotógrafa y mi amiga Naiara con su hijo, fue un momento increíble que recomiendo a todo el mundo, dentro del bar había una moto y nos dejaron sacar unas fotos montados en ella y aunque en nuestro día no todo fue perfecto pues no todo salió bien, ese día puedes con todo lo llevas genial y entre nosotras, ningún invitado se enteró.
Solo queda deciros que disfrutéis de vuestro momento, de vuestro día y que todas las bodas son preciosas, ya sea una boda de más o menos invitados, de más o menos presupuesto, de la más por todo lo alto a la más sencilla, todas son preciosas, únicas y maravillosas porque son nuestro día.
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