La boda de Pedro y Yolanda en Cáceres, Cáceres

A partir de ahí comenzaron los lloros, leyeron mis hermanos, sus amigos y mi tía y prima, y fueron discursos muy emocionantes, hicieron llorar hasta a aquellos menos allegados. Todo el mundo nos dijo que les había encantado y había sido preciosa. Así lo sentimos nosotros. Con música en directo, ceremonia de la arena y votos entre nosotros. ¡Fue la ceremonia perfecta!

Posteriormente fuimos al cóctel donde estuvimos saludando a todos nuestros invitados. Hacía calor en el jardín, pero nada que no se solucionase con bebida. También con música en directo, duró una hora.

Posteriormente la comida, con nuestro brindis y entrada. Comimos tranquilos, todo estaba riquísimo y en la carne nos levantamos a saludar a los invitados. A partir de ahí, comenzamos el ajetreo de varios detalles. Regalos a los padres, regalé el ramo a mi prima (ahijada), regalo de cumpleaños a mi cuñado, corte de tarta, brindis y discurso final en agradecimiento a los invitados que también conseguimos que fuera emotivo y la gente lo disfrutara.

Hicimos el baile, un poco más accidentado de lo que lo habíamos practicado, pero bueno... Salió. Por último comenzó la música y baile, y así hasta las 12 de la noche. Hubo que moderarse en las distancias e intentar bailar en corrillos pequeños, pero aun con eso la gente bailó y disfrutó e incluso se colaron en la piscina (algo que no debían jaja).

Por suerte los comentarios de la gente fueron muy positivos, disfrutaron muchísimo y les pareció una boda muy bonita. Para nosotros, la mejor, claro. De ahí ya solo quedaba la postboda y rumbo a la Riviera Maya, viaje igual de inolvidabe que la boda :)