La boda de Pedro y Victoria en Málaga, Málaga

El día de nuestra boda

Un día increíble, superespecial. Me desperté temprano en el Hotel Mariposa, en el centro de Málaga, un hotel de ensueño, con pétalos de rosas sobre la cama. Vino mi maquilladora y peluquera Anna Dani, un solete de mujer, que te escucha y tiene una paciencia y un don por maquillar y peinar a la perfección y que te dure tanto el peinado como el maquillaje todo el día y más. Me ayudó a ponerme el vestido y me sentí como una reina en el vestido tan precioso que había elegido de la tienda Valerio Luna, colección Higar novias, modelo Quin. La atención en Valerio Luna fue exquisita, mención especial para Rosa y su atención hacia mí. Llegaron el fotógrafo y videógrafo al hotel y subieron a la habitación donde me estaba terminando de peinar Anna Dani. Pronto llegaron mis padres y mi hermano, y empezó el reportaje de bodas, que era una auténtica pasada de fotos y de vídeos tanto antes como durante la boda. Como no había desayunado (¡por los nervios!), empecé a marearme un poco y el hotel Mariposa tan amablemente me subieron comida para desayunar, sin cobrármelo. Salí del hotel y allí estaba esperando el chófer, Fernando, en el coche clásico, el Citroën 1955 11 familiale, ¡precioso! Lo alquilamos de Autotransfer del Sol. A destacar el chófer, un hombre superamable, profesional y vestido de traje elegante. Cuando llegamos a Puerto Niza, todo nos fue perfecto, la atención a los invitados fue excepcional, inclusive la atención a los que tenían varias alergias, como mi padre que es celíaco. Tenían miles de detalles que nunca se me olvidarán. Decidimos decantarnos por una hora y media de copa de recepción y canapés y menos platos para el banquete, fue un acierto. El jamón, también increíble, otro acierto. El lugar es precioso, la comida y canapés, excelentes, y lo recomendaría a todo el mundo. Lo único es que nos arrepentimos de no haber reservado más horas de barra libre (¡reservamos 5!), porque con la música y el DJ, y el photocall (geniales las fotos, ¡y el álbum era superdivertido!), la gente no tenían ganas de volver a casa. Nos acondicionó el horario de recogida de los autocares. Un día inolvidable que no se nos olvidará nunca.