La boda de Pablo y Yaiza en Escalante, Cantabria

El día de nuestra boda

¡Increíble! La mejor frase para definirla es que, a día de hoy viéndola con perspectiva, todo salió como queríamos y no cambiaría nada aunque pudiera. Bueno, me olvidé los votos impresos y tuve que leerlos del móvil… Esa metedurilla de pata sí que la rectificaría si pudiera jeje. La ceremonia fue preciosa, el entorno (un bosque) la hizo mágica, y las palabras de las personas que hablaron consiguieron emocionar a todos. Incluso a los menos conocidos. ¡El día fue maravilloso, sol y temperatura perfecta!

¡La comida fue espectacular y los zapatos no me dolieron nada! ¡Fueron cómodos y, añado truco para las más arriesgadas, spray anestésico de farmacia para pies! ¡Bailé todo lo que había que bailar, y más sobre un buen taconazo!

La fiesta fue muy divertida, nos aseguramos de que hubiera música para todos los gustos e incluimos incluso un corto karaoke con una canción especial para el grupo de amigos íntimo. ¡Durante horas cantamos, bailamos y lo dimos todo! Desde los más pequeños hasta los mayores. El ambiente era todo sonrisas y buen rollo. Eso marcó la diferencia. ¡Y el equipo con el que trabajamos de diez! ¡Es superimportante esto! ¡Sentirte cómodo, arropado y casi entre amigos! ¡Para nosotros fue un punto clave! El equipo de foto y vídeo eran casi colegas y nos sentimos muy relajados en todo momento, nos divertimos y reímos muchísimo. ¡Y el equipo del hotel igual! ¡Da gusto hacer y disfrutar las cosas así!