La boda de Oscar y Eli en Barakaldo, Vizcaya

El día de nuestra boda

Bueno por dónde empezar! Llegó el día tan deseado por años, con miedo fui a la peluquería porque no tenía fe de que lograra el peinado que quería en plan romántico años 50, mi vestido era romántico, mi sorpresa fue que en menos de una hora estaba ya lista para el maquillaje y ¡madre mía menudo peinado! me maquilló una de mis seis damas de honor.

Era el momento de entrar a la iglesia de la mano de mi padre....mil cosas me pasaron por la cabeza, emociones ansiedad ganas de llorar todo junto, ver a mis damas de honor todas vestidas de azul con sus ramos entrado por la iglesia con la canción que escogí anunciando mi llegada fue increíble. Los invitados no se lo esperaban y quedaron alucinados al compás de la música, entraron los niños arras tirando pétalos de rosa.... me toca me toca....la cara de mi marido era un poema todos llorando a más no poder y yo con una sonrisa que luego me dolía la cara.

Al llegar al restaurante Montenegro me encuentro con más sorpresas del lugar a todo esto se le suma que vinieron amigos de argentina, Alicante, Madrid con mucho esfuerzo. Los invitados nos recibieron con un pasillo de música movida. Que bien lo pasé, no tengo palabras para expresar la felicidad que teníamos y los buenos recuerdos que nos llevamos.