La boda de Oscar y Diana en Valencia, Valencia
De noche Primavera Rojo 8 profesionales
O&D
24 Sep, 2016El día de nuestra boda
Fue el día más feliz de mi vida, aunque empecé con mal pie, ya que se me rompió el quinto metatarsiano del pie 2 semanas y media antes de la boda.
En ese momento me derrumbé porque, por una simple torcedura del pie, me dijeron de 6 a 8 semanas de escayola. Yo no me lo podía creer, no paraba de llorar. Hablé con el traumatólogo y le pedí que por favor me quitara la escayola para mi boda, que me quedaran 2 semanas para casarme, y no me quería casar en silla de ruedas. Me dijo que sí, que entendía que era una situación para quitármela. Me la quito 2 días antes de la boda y fue apoyar el pie en el suelo y rabiaba del dolor. Más lloros porque me había comprado unos zapatos de taconazo increíbles y, el día de mi boda, seguía sin poder apoyar el pie. Los taconazos no me los pude poner, pero me compre unas cuñas bajitas de novia por si acaso no podía ponerme el tacón, pues fue ponérmelo y más o menos podía andar.
Pude llegar al altar andando y aguaté toda la noche; pude bailar y lo pasamos genial. La boda la elegí en jardines la Hacienda, unos jardines preciosos.
Seguir leyendo »La ceremonia estuvo muy bien decorada y muy emotiva, ya que salieron nuestros hermanos y amigos a dedicarnos unas palabras. No parábamos de llorar; yo llegué con un Cadillac rojo y, la verdad, llamó mucho la atención.
Elegimos unas canciones preciosas y mi suegra nos dio una sorpresa sin que supiéramos nada, que me encantó. Contrató una batucada que dio una marcha increíble y todo el mundo bailando, fue una pasada en el salón.
Nos regalaron la barra de cócteles, el cortador del jamón y bocadillitos de ibéricos. La comida fue increíble: caliente y mejor que el día de la prueba.
El arroz lo hice de colores, algo muy original. Además, puse abanicos en la ceremonia, chanclas para las invitadas y, luego, en vez de poner una mesa de golosinas, me hizo una clienta mía una tarta enorme de gominolas, como si fuera una tarta nupcial grande, y los muñecos eran Barbie y Ken.
Di muchos regalos: un ramo para cada madre y, como tengo una hija de 14 años de mi anterior matrimonio, le hizo un ramo de novia pero de gominolas que le encantó.
El día estuvo genial, hasta las 06:00 de la mañana fue increíble todo. Salió como lo había soñado, pese a que no me pude poner los tacones, pero hay que pensar que podía haber sido peor.
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