La boda de Omar y Teresa en Gandia, Valencia

El día de nuestra boda

¡El día de mi boda fue perfecto! Salió un día caluroso de octubre, no madrugamos porque me casaba por la tarde y el día de antes habíamos hecho serenata con mariachis y nos acostamos tarde.

Lo mejor fue poder tener a mi familia y la de mi marido (que vinieron desde Estados Unidos) todos reunidos.

Mis damas hicieron su entrada en la iglesia delante de mí, junto con mi madre y mi hermano, sonando la canción de “hasta mi final” de Il Divo, y ahí lo tenía a él delante de mí llorando, muy emocionado por verme.

Llegamos al convite un poco tarde, y casi no pudimos probar la comida del cóctel, porque los invitados ya llevaban rato allí esperando y tuvimos que entrar pronto para no tenerles tanto rato fuera.

Mi prima me había hecho la decoración de la entrada con un cartel y nuestras iniciales, y me preparó la mesa de los dulces, todo precioso con unos muñecos de goma eva.

Comimos hasta reventar, dimos los regalos especiales y los detalles para todos los invitados, y antes del baile nupcial, mi hermano me dio una sorpresa leyendo una carta que había hecho él, todos terminamos llorando, ¡fue muy bonito!