La boda de Mario y Angeles en Sevilla, Sevilla

La ceremonia creo que fue bien, no nos equivocamos al hablar ni nada. ¡Por suerte en una ceremonia religiosa no tienes que hablar mucho porque no sé cómo hubiera resultado! El dúo de cuerda que contratamos (Grupo musical Nubia, también podéis encontrarlo en esta web) nos acompañó con las piezas que le pedimos y también nos aconsejaron perfectamente.

De camino a la celebración hubo bastante atasco y al llegar no pudimos hacernos las fotos tranquilos en la hacienda porque ya había invitados, pero nos lo pasamos bien en el camino y no nos dio tiempo de aburrirnos. ¡Eso sí, cuando fui a la recepción, ya se habían acabado la mesa de quesos! No pasé hambre (como les pasa a otras novias) y estuve contenta de ver a todos comiendo, disfrutando y todo el mundo me decía que toda la comida estaba muy buena.

La Hacienda Azahares no puede ser más bonita, todos los invitados estuvieron todo el rato haciéndose fotos en el patio, en los salones, en el jardín... Y todas son preciosas. El banquete lo habíamos tematizado con juegos de mesa, y en cada mesa había un juego diferente, ¡así los invitados no tenían opción de aburrirse!

Para la barra libre contratamos un puesto de buñuelos, palomitas y algodón de azúcar que fue la sensación de la boda. A todo el mundo le encantó y duró hasta casi el final, cuando se fueron, el catering sacó la recena y fue perfecto. Fue una fiesta increíble. Nos lo pasamos tan bien que repetiría una y mil veces.

Todo lo que te cuentan de que se pasa en un suspiro es verdad, se me hizo muy corto el día a pesar de lo cansada que estaba por todo el ajetreo de los días previos. Si alguien que se va a casar me lee, le diría que no deje para última hora los detalles que parecen insignificantes o que se tarda poco, ¡porque al final se acumulan y te estresan a última hora! Y que luego ese día sientes que todo es perfecto, que aunque se te hayan olvidado cosas o no te diera tiempo de hacer algo, porque lo más importante es que estás con tu pareja y disfrutando con todos tus seres queridos. Que no te va a dar tiempo de estar con todas las personas todo lo que te gustaría y que eso es normal, la gente lo entiende y solo quiere verte feliz.

¡Ojalá pudiera volver a casarme!