La boda de Marcos y Sheila en Oña, Burgos

El día de nuestra boda

Fue el mejor día de mi vida, me casé con la persona más maravillosa, mi marido.

Al llegar a la iglesia salí con los globos en forma de corazón, para después entregarlos a los invitados, con mi despiste que se me olvidó coger el ramo del coche, hasta que se dio cuenta alguien y me lo trajeron a la iglesia, pero no pasa nada yo estaba igual de feliz al ver a mi futuro marido, ya ni me acordaba del ramo.

Son pequeños percances que pueden pasar pero que eso no os ponga tristes ni mucho menos, yo ya os digo ni me percaté, al final tienes las cosas planeadas de una manera y alguna no quiere salir como tiene que ser, pero no hay que preocuparse, todo tiene solución y hay que disfrutar del momento tan bonito.

Yo tuve doble regalo ya que me casaba el día de mi cumpleaños así que fue muy emotivo todo y doble felicidad, me hicieron varias sorpresas, me regalaron colgantes y me hicieron fotos con una polaroid que más tarde me dieron el libro firmado por todos y en él se veía el transcurso de la boda.