La boda de Marco y Patricia en Barcelona, Barcelona

El día de nuestra boda

¡Empezar a escribir esto es realmente tan emocionante!

Recuerdo que esa noche no había pegado ojo. Después de tres años durmiendo con mi novio, ahora mi marido, realmente me costó poder conciliar el sueño.

El jaleo de la mañana empezó a las 09:30horas, cuando llegaron mi madre y mis dos hermanas para esperar a la peluquera y maquilladora. Es escribiendo esto que realmente te paras a pensar en lo rápido que transcurrió el día. Luego llegaron los fotógrafos y empezaron los nervios. Un sin fin de gente que entraba y salía: peluquera, maquilladora, fotógrafos, floristería, etc. Que por ciento, que cuando llega el ramo y estás vestida es un momento muy muy bonito, cuando tus seres queridos te miran y ves lo emocionados que están.

Ya era la hora de ponernos en marcha. Habíamos contratado un coche caballo para llegar al sitio donde nos casaríamos, y también un caballo para llegar hasta el altar. Yo estaba súper emocionada de llegar sobre un caballo y ver a mi futuro marido esperándome al final del camino. Todos derramando lágrimas, fue realmente emotivo. Y allí estaba por fin, después de 24 horas sin verle, esperándome tan guapo como siempre, pero esta vez de una manera tan especial.