La boda de Manuel y Nuria en Narón, A Coruña
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M&N
20 Ago, 2016El día de nuestra boda
¡No solo fue el día de mi boda!
¡La noche anterior un andaluz de Jaén me trajo a mi casa gallega una serenata de gaiteiros!
No me lo esperaba, sabía que era una tradición en su pueblo, pero como era en el mío y en mi casa no hay sitio para dar el picoteo que se pone después pensé que yo no tendría eso.
¡Me encantó! Además es la oportunidad perfecta para que la gente se conozca antes de la boda.
Acabamos un poco tarde, pero yo al día siguiente ya estaba despierta temprano. Arreglé unas cajas con las cosas para llevar al hotel del que salía yo y me fui a la peluquería, fue un pequeño caos porque aun esa misma mañana tuve que acabar de envolver algunos detalles, porque vivo fuera en Francia, y no me llegó el tiempo a más.
Pero gracias a Bodas.net encontré todo lo que necesitaba para poder organizar mi boda a distancia. En el hotel estaba tranquila, pero como los chicos del video ya habían visto al novio, les interrogaba sobre él, porque además le había mandado un juego de maletas de regalo a su peluquería.
Seguir leyendo »Cuando llegué a la ceremonia él me estaba esperando desde hacía una hora, porque se le ocurrió la feliz idea de ir media hora antes de la hora de la boda para asegurarse de que llegaba antes que yo…
Nunca olvidaré cuando estaba entrando en la zona de la ceremonia y lo vi a él. No paraba de repetirme lo guapa que estaba. Él también estaba muy guapo.
Fue la ceremonia más emotiva que he visto en la vida. Cuando mi hijastra salió a leernos algo y de los nervios se le cayó el papel y empezó a decirlo de memoria fue muy simpático.
Pero cuando empezó a recordar cuando buscabamos como locos un cacho de tela por todos lados porque si no se ponía a llorar o cuando yo jugaba con ella en la bañera haciéndonos peinados de espuma ya no aguantamos más, y toda la boda se echó a llorar.
Fue precioso con lecturas e su humana y una amiga mia. Para mí fue lo más especial.
El coctel y banquete lo pasamos muy bien.
Como teníamos gente de Andalucía, Barcelona, Alemania, Francia y Suiza quise enseñarles el mundo gallego con pulpeira y queimada.
Para mi marido traje una máquina de algodón de azúcar porque es nuestra chuche, para los niños un hinchable y como detalle especial tiramos unos fuegos artificiales, que puse también de fondo en el fotomatón para que lo tuviesen de recuerdo.
Trabajé mucho porque para poner esas cosas había que recortar en otras así que hice detalles a mano, kits de emergencia a mano, le hice una coreografía de baile a mi marido con mis amigas, incluso reduje en el tema flores para poder poner lo que quería.
La gente se lo pasó genial en la barra libre porque pusieron música de todo tipo. Aunque se quedaron con ganas de más porque luego nos fuimos a la discoteca.
Mi marido casi no sabía nada porque me encargué yo de todo, parecía un invitado más, pero así se sorprendió como el resto y sabemos mejor cómo lo vivieron los invitados.
Repetiríamos sin dudarlo una y otra vez. Fue mucho trabajo pero mereció la pena. Y como recordatorio, el domingo me tatuó mi prima el logo de la boda con las iniciales mía y de mi marido.
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