La boda de Luis Enrique y Nuria en Ponferrada, León
De noche Verano Rosa 7 profesionales
L&N
15 Jul, 2017El día de nuestra boda
¡La noche anterior dormí con mi cuñada y mi mejor amiga, las tres en la misma cama! Yo me dediqué a dormir puesto que estaba muerta de cansancio. Estuvimos toda la semana anterior al día B, preparando mi ahora marido y yo las cosas de la boda. Nos encargamos nosotros de toda la decoración, del photocall, de las mesas del cigar córner, personalízate, candy bar, etc. ¡No habíamos parado ni para respirar! Así que dormí entre ellas plácidamente mientras se dedicaban al “critiqueo”.
Nos despertamos temprano, como soy un poco maniática y muy nerviosa, pedí cita en la peluquería a primera hora. Me casaba a las 18:00 horas de la tarde y a las 09:30 horas de mañana ya estaba yo allí para prepararme. Antes de nada, desayunamos en casa tranquilamente y estuvimos conversando un rato. De la peluquería salí casi a la hora de comer y tenía pensado quedarme en casa tranquila y sola para controlar mejor los nervios, pero sorprendentemente no estaba nada nerviosa, por lo que decidí ir a comer con mi hermana y cuñado. Me fui para casa, me volví a duchar relajadamente y al poco tiempo, llegaron mi hermana, mis padres, mi mejor amiga y mi cuñada con el videógrafo y las chicas de las fotos. Se pusieron a vestirme, que yo no sé que ocurre en otras casas, pero en la mía fue un caos. Todas (menos yo) histéricas, super nerviosas y casi llorando. Yo super tranquila, estaba demasiado segura del paso que iba a dar. Cuando me acabaron de vestir, subió mi padre a la habitación y ahí si me rompí al verle llorar. ¡Fue el momento más especial del mundo!
Seguir leyendo »Llegó el coche, cogí mi ramo y a mi padre del brazo y nos fuimos a la iglesia. Llegué puntual y casi no recuerdo como fue mi entrada, mi padre se puso nervioso a llorar y me metió a toda prisa a la iglesia. Cuando me di cuenta, ya estaba sentada, mirando a mi espectacular marido. Cuando comenzaron con las lecturas, salieron mi hermana y cuñado a contar una historia preciosa y graciosa sobre nuestras vidas, ¡fue toda una sorpresa!
Salimos de la iglesia super emocionados y muertos del calor y nos fuimos directamente a hacernos las fotos. Llegamos lo más pronto posible al cóctel, donde ya nos relajamos y disfrutamos con la familia y amigos. Pudimos escuchar más calmados a nuestro cuarteto de cuerda, que tocaron tanto en la ceremonia como en el cóctel.
Cuando llegó la hora de cenar, entramos al banquete, todo cristales hacia el jardín, luz tenue dentro e iluminación fuera, la gente de pie saltando y nosotros hicimos nuestra entrada con "Tengo el corazón contento" de Marisol. Fue super divertido, nunca lo olvidaré.
Tuvimos mucha suerte con todos los invitados, estaban super animados y “alcoholizados”, ellos solos hicieron la fiesta. Al acabar el primer plato, le dimos un regalo sorpresa a mis cuñados y a nuestros mejores amigos.
Tras el plato de carne, entregamos los ramos a las madres, era una réplica de sus ramos de novia, se emocionaron mucho y nosotros también.
Llegó la hora del baile, era fuera y yo aproveché para cambiarme y ponerme mi segundo vestido de novia. Preparamos un baile increíble con la canción "Unchained melody" que fue sorprendente. Tras acabar, pedí a las chicas solteras que se pusieran detrás de mí para tirar el ramo, conté 1…2… ¡Y mi cuñado me paró, cogió mi ramo, se acercó a mi hermana y se arrodilló para pedirle matrimonio todo el mundo se puso a llorar y a todos se nos rizaron los pelos!
Como el ramo ya iba destinado a mi hermana, tiré uno de gominolas, para que hicieran una carrera a por él, fue un momento muy cómico también. Tras esto, lo dimos todo en la barra libre y el resto no os lo puedo contar.
Ahora mismo, vuelo hacía Frankfurt y después hacía España, venimos de nuestra luna de miel en Las Vegas, Los Ángeles y San Francisco, ¡ha sido lo más! Gracias por tomaros un rato en leerme.
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