La boda de Libertad y Azucena en Santa Elena, Jaén

El día de nuestra boda

La preparación fue bastante rodada, todo muy bien. Lo dejamos todo atado para irnos de vacaciones en verano con tranquilidad, pero en las mismas vacaciones, a falta de 1 mes para la boda, el lugar donde la celebrábamos nos dejaba en la estacada por motivos sospechosos. Con todo, el estrés de no encontrar un sitio similar y cercano al lugar, ya que los invitados ya tenían reservado lugar donde alojarse porque era una boda de 2 días…

Una mujer superencantadora y generosa, Maite, nos ofreció su lugar y movió cielo y tierra para conseguir que pudiéramos celebrar nuestra boda con las mejores condiciones. El lugar se llama El Jaral, y desde luego, repetiremos allí nuestro aniversario, ya que es un lugar espectacular, precioso, mágico y encantador. Lo que pueda decir se queda corto.

Al final nuestra boda fue de ensueño para nosotras. Con juegos para los niños, para los adultos, informal, los invitados bañándose en la piscina, respetando y disfrutando la naturaleza, charlando todos con todos. La ceremonia fue tal y como imaginábamos. ¡Una maravilla! Justo lo que queríamos, que los invitados estuvieran cómodos, comieran bien y que nosotras también disfrutáramos del día de nuestra boda como ningún otro día.