La boda de Laura y Sergio en Salamanca, Salamanca

Decoración no pusimos nada... Unos botes de cristal con cuerda de rafia para decorar la mesa de ceremonia fue lo único. El jardín está súper verde y bien cuidado... Así que no hacía falta nada. ¡Nosotros fuimos a hacernos las fotos con Foto Galán por los jardines, qué bonitos!. Esta mañana fuimos a buscarlas y estamos encantados. Es justo lo que queríamos... Fotos sin posados, preciosas de colores, sale todo el mundo, él se iba ofreciendo para hacer fotos a la gente que estaba por allí. Muy muy bien. Tenemos fotos de todos. Bueno... Y el photocall ya en la fiesta un desmadre... La gente se lo pasó fenomenal.

Mientras nos hacíamos las fotos la gente empezó con la cena, que era tipo cóctel. A mí vinieron varias personas a preguntarme cual era el jamón... Que estaba espectacular. La gente flipó con una barra de quesos... Los pinchos, las croquetas... He preguntado y no eh oído ni una sola queja. Además, los camareros estaban súper pendientes de Sergio y yo para que no pasáramos hambre ni sed... Así que muy guay.

Y luego estaba Claudia. Yo no quería tener que estar pendiente de nada que no fueran mis amigos y la familia ese día... Y ella fue la que venía y nos decía... ¿Queréis que demos los regalos de los niños? Así que juntaban a los niños y nos traían los regalos para dárselos a los niños, lo mismo con los invitados, los postres, cortar la tarta... No tuvimos que preocuparnos por nada que no fuera disfrutar.

Y vaya si lo pasamos bien...Hicimos un baile muy chulo (canción Amo a Laura y tango incluídos) La música de la ceremonia y de la fiesta la puso The Wedding Rock Band. Y muy bien. La gente muy animada, él nos preparó los cortes para el baile, nos proponía antes de la boda canciones para la ceremonia.

¡La gente lo dio todo! las copas muy ricas y la música muy chula... Una pasada... Antes de que nos diéramos cuenta ya eran las 4 de la mañana... En el autobús de las 12 creo que no se fue nadie...en el de las 2 muy poquitos... No veáis la cantidad de gente que quedaba allí a las 4. Y cómo hacía tan buena noche mucho estaban en los porches hablando, fumando, paseando... Un ambientazo había.

Después de pensarlo decidimos seguir de fiesta en Salamanca... Y la verdad es que había millones de sitios abiertos. Ir vestidos de novios por Salamanca moló una barbaridad… Vivan los novios a tutti y mucha gente parando el coche para darnos la enhorabuena.

¡Y nada... A las 8 o así llegamos al Hotel Rector, que el Páramo nos había reservado allí una habitación suite muy grande! Resumen: ¡una pasada!