La boda de Kike y Alicia en Alacant/alicante, Alicante
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K&A
05 Oct, 2019El día de nuestra boda
Pues creo que, prácticamente todas, debemos coincidir es este punto: el día de mi boda fue maravilloso. Es increíble la felicidad que puedes llegar a sentir, rodeada de toda la familia y los amigos, en general, de la gente que más quieres.
Si nos metemos en detalles. El día anterior a la boda, yo me fui a casa de mis padres, y mi pareja, para aplacar los nervios, se fue al cine. Habíamos quedado en que después del cine me recogería, ya que había olvidado unas cosas en nuestra casa y, de paso, ensayar una vez más el baile. A las 00:00h aún no había regresado, y yo estaba de los nervios, jaja
Bueno, al final me recogió, ensayamos, y me llevó de vuelta a casa de mis padres. Esa noche me costó muchísimo dormir, aunque cuando caí, caí de verdad.
A la mañana siguiente, bien tempranito, vino la maquilladora para arreglarnos a mí y a mi madre, y mi tía vino para peinarnos, y a las 11 llegaron los fotógrafos. La verdad es que todo se me pasó volando. No creía que ya hubiese llegado el día, y no cabía en mí de la felicidad que sentía.Nos hicimos fotos, hicimos un poco el payaso, nos arreglamos, bailamos, y de golpe llaman porque ha venido el coche a por mí. Como teníamos tiempo de sobra, el chófer decidió darme una vuelta por Alicante para que me luciera y pudiera ir saludando a la gente que me gritaba: "viva la novia". Me sentía como una princesa, la verdad. Pero llegó el momento.
Seguir leyendo »Nos encaminamos a la Iglesia de Santa María, baje del coche y me paré en la puerta, y allí estaba él, guapísimo de azul del brazo de su madre. Nos miramos, y casi la lío porque me entraron unas ganas de llorar de la emoción, aunque aguanté el tipo.
Cuando empecé a caminar dirección a él, empezó a cantar el coro una versión clásica de Frozen (aún se me ponen los pelos de punta), y por fin llegué a él. Qué sensaciones y qué rápido pasó todo. Entre las lecturas, las risas con Hugo, el nene de los anillos, y el sacerdote que, en un momento dado casi termina antes de tiempo por un error, jaja. Por fin salimos de allí como marido y mujer, y pensé que no podía ser más feliz, pero me equivocaba.
Llegamos a la finca, entre los saludos, los besos y la sorpresa de mi primo cantándonos, pasó el cóctel y llegó el momento de entrar a la zona del banquete. Entramos bailando y haciendo el "tonto", que es lo que más nos gusta con una canción de Bollywood, que tanto nos pedían los amigos.
Cuando me senté a la mesa, mi mente se relajó y pude ver la estampa, no pude más, y la emoción me pudo al ver a tanta gente que había allí por nosotros, a tanta gente que había hecho el esfuerzo para compartir ese día tan especial con nosotros, así que, en ese momento, las fuerzas se me agotaron y no pude evitar soltar alguna lagrimilla de felicidad.
Se fueron pasando las horas, y los platos, y, entre risas, regalos, besos y abrazos, las horas iban pasando. Es cierto eso que dicen que debes probar la comida en la prueba de menú porque el día de tú boda no comes nada, jaja
La verdad es que es un día muy, muy bonito. Aquellos que no tienen claro si casarse o no, o que celebrarlo es una tontería, realmente les digo que no que lo hagan. Es un día para recordar y, además, no hay porqué hacer algo grandioso, tan solo juntar en un sitio a todas aquellas personas que quieres para celebrar, puesto que, desgraciadamente, parece que siempre nos juntemos por cosas malas.
Sé que he dado un poco la brasa, pero bueno, decían que contara cómo nos sentíamos y cómo vivimos ese día, y me he dejado llevar, jaja
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