La boda de Juan Carlos y Patricia en Laguna De Duero, Valladolid

El día de nuestra boda

Fue un día inolvidable... Todo salió perfecto, estaban todas las personas que queríamos a nuestro lado y lo celebramos en un lugar mágico. El día comenzó con muchos nervios, la novia como es obvio tiene mucho que preparar antes de llegar a la iglesia, peluquería, maquillaje, retoque de uñas... ¡Toda la mañana dejando que me mimaran y que me pusieran guapa! Después de comer llegó el momento más esperado, con el batín blanco empezaron las fotos de los preparativos, ¡por fin me iba a poner mi vestido!

La elección del vestido fue culpa del destino. Justo un año antes de casarnos vi en Pronovias el vestido de mis sueños. Le mandé a mi madre la foto con la frase "mamá, este es mi vestido" y cuando fui en febrero a probármelo... Mi madre empezó a llorar nada más salir del probador. No había dudas, era ese. Volviendo al día de la boda, mi tío fue mi chófer y junto a mi padre y a mi madre fuimos a la iglesia. Cuando entré no era capaz de ver a nadie más que a Juancar en el altar. Un momento maravilloso que siempre recordaré.