La boda de Josep Mª y Laura en Alella, Barcelona
Rústicas Otoño Verde 6 profesionales
J&L
23 Sep, 2018El día de nuestra boda
Yo no creía demasiado en las bodas, en realidad no queríamos una gran boda. Tuvimos 64 invitados nada más. Visitamos un lugar en Alella, llamado Masía Mas Coll. Ese día estaba confundida, no sabía realmente cómo iba a ser todo. Me daba miedo ser el centro de atención. Nos enamoramos del sitio desde el segundo uno. El lugar dispone de una pequeña bodeguita en el que te envuelve y te hace sentir que estás en otro lugar, como en una pequeña capilla apartada del mundo. Tengo entendido que la masía es del año 1.700 aproximadamente (increíble). Visitamos dos lugares más, que no voy a nombrar, y la verdad es que te lo intentaban vender demasiado, muy estudiado el marketing, en cambio en Mas Coll fue fácil. Podéis elegir el lugar y podéis elegir hacer la ceremonia donde queráis, pica pica donde queráis y cena donde queráis. No hizo falta hablar mucho sobre donde queríamos celebrar nuestro día. La verdad es que para los preparativos nosotros no tuvimos muchos problemas, ya que allí ya recomiendan qué es mejor y nos dejamos guiar por todo el equipo, ya que no teníamos ni idea de nada, ya que no nos habíamos casado nunca. El novio se vistió en un Hotel que hay a un kilómetro y reservamos para dormir ese día, y yo me vestí en la Masía Mas Coll, me ayudaron mi madre y mi mejor amiga. La masía dispone de una habitación preciosa para que la novia se vista.
Seguir leyendo »La ceremonia la celebramos en la bodega de la masía, tiene un encanto que parece que sea una capilla de un lugar remoto.
Yo me quedé en las escaleras arriba con mi padre para poder escuchar la música de la entrada del novio, con la canción de la B.S.O de Gladiator versionada con Cellos
Y llegó el momento de entrar. Mi canción fue la de pachelbel canon in D. Ese momento no lo cambiaría por nada y será un recuerdo increíble que tendré toda mi vida. La ceremonia la realizó mi cuñado, hermano del novio, fue muy emotiva, divertida y cortita unos 20 minutos.
Mi mejor amigo es cantante y montó un mini concierto en la bodega, fue realmente sorprendente, nos hizo una canción exclusiva para nosotros.
Llegó la hora del pica pica, de mientras nosotros nos realizamos la sesión de fotos. Nos daba bastante pereza, pero desde el minuto uno conectamos con los fotógrafos (fotografía Jan Aymerich), mientras hacíamos la sesión el personal de la Masía nos iba ofreciendo diferente tipos de tapas que estaban llevando a los invitados, fue exageramente perfecto.
Estuvimos en el pica pica haciéndonos fotos con los invitados, y hablando como si estuviéramos en nuestra casa haciendo una gran fiesta que es como creo que tiene que ser.
Llegó la hora de la cena. Compramos como detallito un sal y pimienta con forma de corazón blanco y negro, mr and ms. Los invitados entraron primero, al sentarse tenían su tarjetita escrita por mí con su nombre, y detrás un escrito personalizado dando las gracias y recordando algún momento de nuestras vidas.
Entramos con la canción de la B.S.O. de Rocky, corriendo como en la película. Todo el mundo gritando, riendo, levantando servilletas arriba. Muy divertido.
Llegó la hora del pastel, presentado maravilloso y precioso con la canción que escogimos fue Now or Never de Elvis que es una versión de O Sole Mío. Luces apagadas y bengalas quedó muy mágico. Todo el mundo se quedó boquiabierto. Compramos unos muñequitos especiales para mi mejor amiga y su pareja que se casan el año que viene y han tenido una bebé y los muñequitos salen con un bebé en brazos. el año pasado fuimos de vacaciones juntos a Cerdeña y no parábamos de escuchar canciones italianas, así que pusimos la canción de Il mondo de jimmy fontana, en cuanto sonó nuestra amiga se percató y ya estaba llorando, fue divertido y emotivo.
El ramo (Lilart Flors) encargué que se pudiera dividir en 3 partes. Le di una a mi abuela, otra parte a mi madre y otra a mi suegra. Con una canción de Nat King Cole que mi abuela me cantaba de pequeñita, todas lloramos... Con la música del padrino dimos regalos a los hombres de la familia.
Y llegó el momento de nuestro primer baile, Can't fallinf in love de Elvis, con la entrada de 6 amigos todos con gafas de sol e hicimos una coreografía previamente ensayada tres días nada más, con las canciones de Tom Jones, Apache Mode, típicas de coreo de boda.
Una vez acabada teníamos una discoteca con 3 horas de barra libre y contratamos un fotomatón (festiva't) con atrezo que te imprimían dos copias de tiras con 3 fotos y un logo con nuestros nombres. Una tira era para el invitado como recuerdo y la otra tira la pegaba el invitado a un álbum donde podían escribirnos lo que quisieron, tenemos un recuerdo precioso porque quedó genial.
Las 3 horas pasaron volando y desde ese día creo en las bodas y me volvería casar una y otra vez para poder volver a vivir ese día tan mágico, emotivo y especial que fue.
Estoy muy feliz porque tengo un marido maravilloso y doy gracias todos los proveedores contratados porque salió todo sobre ruedas. La palabra final es: felicidad.
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