La boda de Joaquin y Cristina en Almería, Almería

El día de nuestra boda

El día empezó con muchísimo viento y lluvia, pero yo estaba tranquila porque algo me decía que se iba a quitar. Y así fue. Nada más llegar al restaurante (donde también hicimos la ceremonia en los jardines) salió un sol radiante y pudimos disfrutar de la ceremonia y el cóctel en los exteriores. Todos los nervios que había tenido hasta ese día desaparecieron y así pude disfrutar de cada detalle, de cada momento. Mi marido radiante esperándome y yo deseando darle el sí. Fue muy emotiva, muy bonita y llena de sorpresas para las personas más especiales, que a su vez me sorprendieron a mí tambfén.

Se apagaron todas las luces, sonaba una canción superbonita y en fila india Fueron cada una trayéndome una flor hasta formar todo un ramo. ¡Y la última flor del ramo me la trajo mi sobrino de 3 años! Pude morir de amor y resucitar 20 veces. ¡La fiesta fue inolvidable! A última hora nos quedamos solo 6, y ya con la despreocupación de no tener que estar pendiente de nadie, ¡lo dimos todo! Fue un día genial y memorable, que te deja un dulce sabor de boca y que piensas que ojalá se pudiese echar el tiempo atrás una y otra vez para volver a vivirlo.