La boda de Jesús y Laura en San Sebastian De Los Reyes, Madrid
Al aire libre Verano Gris 9 profesionales
J&L
03 Sep, 2016El día de nuestra boda
Después de meses de preparativos, mucha ilusión y casi 14 años de amor, esfuerzo y superaciones, abrí los ojos aquel día sabiendo que probablemente sería el más feliz de mi vida. Desayuné con mi chico y pronto nos despedimos.
La mañana del 3 de septiembre estuve casi más tranquila que en un día cualquiera. Para prepararme, cogimos una suite preciosa, y en las horas que estuve sola me puse música, me di una ducha super relajante y me dediqué a pensar en todo lo que me deparaban las próximas horas, y escribir unas palabritas por si me atrevía a decirlas en la cena.
Sobre las 11:30 llegaron dos de las personas con quienes más me apetecía compartir esos momentos, mis maravillosas amigas Laura y Roci. No tengo palabras para agradecerles el buen rato que me hicieron pasar ni para transmitir lo que las quiero y lo que les agradezco todo lo que se han implicado con la boda. Roci, a parte de amiga, es mi cuñada, por lo que pronto se marchó con su hermano para ayudarle a prepararse. Así es que me quedé con mi Lau y con otro gran amigo, Roli. Ambos serían los encargados de dejarme guapa: la mejor maquilladora y el mejor peluquero del mundo.
Seguir leyendo »Pasamos unas horas divertidas, bastante tranquilos. Comimos unos sándwiches y en cuanto tuve el maquillaje y el peinado listos, llegaron la mejor madre y la mejor hermana del mundo para ayudarme con el vestido; fue un día muy especial también para ellas y les agradezco enormemente que estuviesen ahí. Los fotógrafos estuvieron con Jesús de 15:30 a 16:30 y después se vinieron conmigo. Las horas pasaban sin darme cuenta y según avanzaba el tiempo mis nervios eran cada vez mayores. Llegaron enseguida mi padre, que fue un padrino 10 y lo quiero con locura, y otra preciosidad de amiga que tengo, Merce, con su pequeña Zaira, que es una absoluta princesa; ellas me trajeron el ramo y me hicieron muy feliz con su presencia.
La sesión de fotos de mis preparativos fue divertida pero yo estaba un poco tensa por los nervios y porque empezaba a írsenos de las manos el tiempo. La boda era a las 18h, y a las 18:10 seguíamos todos en el hotel. Nos dispusimos a salir ya hacia la Iglesia cuando me encontré con la primera gran sorpresa del día: un precioso coche clásico que había contratado Jesús para mí.
Mi entrada a la iglesia al final no fue hasta las 18:20, pero finalmente ahí estaba, del brazo de mi padre y dirigiéndome, ya casi sin nervios, hacia el que en breves momentos se convertiría en mi marido. Por delante de mí entraban 4 niños de arras: Zaira y mi primito Luis, ambos de menos de 2 años, llevaban las alianzas y las arras y lo hicieron increíblemente bien para ser tan pequeñitos. Detrás de ellos iban dos princesitas primas de Jesús, Elisa y Ángela, con un cartelito que decía: "Primo Chus, aquí viene Laurita". El recorrido hasta el altar lo recuerdo con muchísimo cariño: todos los invitados pendientes de mí, recuerdo miradas, sonrisas, "qué guapa"... Mi bellísima amiga Ali se puso a llorar como una magdalena en cuanto me vio, y entonces me eché a llorar yo también pero pude controlarme y subir la mirada para ver a Jesús... ¡Le vi tan tan, tan guapo! La ceremonia fue breve y amena, las lecturas las hicieron dos primas de Chus, Sandra y Anabel, que iban preciosas y las quiero un montonazo, y mi hermano pequeño, Jorgito, que me lo comería a besos de lo bien que lo hizo. Después varios amigos leyeron las peticiones y como cierre mi Roci nos leyó un texto que emocionó a toda la iglesia. Y como quien no quiere la cosa, ¡nos casamos! Con Iván y Laura como testigos de boda (¡gracias, amigos!).
Nuestra salida de la iglesia fue super alegre, nos echaron arroz a toneladas, pétalos de rosa rojos y kilos de confeti. Saludamos a quienes pudimos y nos marchamos en el coche nupcial a hacer las fotitos de recién casados en un parque cercano a la iglesia. Fue genial estar un rato "a solas", mirándonos, tocando nuestros trajes, diciéndonos lo que nos queríamos y lo guapos que estábamos, dándonos la mano, besándonos, abrazándonos.
Sobre las 20:30 llegamos al cóctel. Nuestros amigos Tamara, Fer y su increíble familia, que también es la nuestra, ¡lo habían dejado todo precioso! Infinidad de detalles que tanto tiempo llevábamos planeando y ahora eran realidad y muchas cositas que ni nos esperábamos...
Todo marchó estupendamente, como no éramos muchos invitados nos dio tiempo a estar prácticamente con todo el mundo. La gente comió, bebió y lo pasó de lujo (¡tanto que nos dieron las 7:30 de la mañana!). La cena fue una pasada, en nuestra entrada al banquete vimos cómo un montón de invitados se ponían de pie y animaban con sus servilletas, hubo muchas risas y sorpresas y la comida fue muy abundante y rica.
Tras la cena, ronda de mesas para hacer fotos con todo el mundo y después sorpresas que nos emocionaron muchísimo: para el brindis, dos personas muy especiales, Lourdes y Eva, junto con sus familias, nos trajeron copas luminosas personalizadas con nuestro sello de la boda... ¡Fue increíble y les agradecemos muchísimo el detallazo inesperado! Nuestra amiga (y celestina) Ali, acompañada de mis grandes amigas de la infancia, Merce, Gema e Irene, nos hizo un precioso discurso que nos llegó al corazón. Después Laura y Roci salieron a presentarnos el vídeo que habían preparado para proyectar, un vídeo hecho con un cariño y un cuidado que no es normal. Para terminar con el momento cena, los peques que teníamos al cuidado de unos animadores infantiles que contratamos, nos dieron los regalitos que nos habían estado preparando toda la noche: unas tarjetitas en las que nos habían dibujado. Y yo me atreví a leer las palabritas que había preparado, a las que Jesús respondió con un discurso espontáneo y precioso que nunca podré olvidar.
Llegó el momento del baile. Habíamos estado ensayando una coreo especial con salto incluido con la canción 'Hasta mi final' de Il Divo, pero estuvimos a punto de abortar la misión por el volumen de mi vestido... No sabemos cómo, pero finalmente nos vinimos arriba y salió un baile precioso que consiguió emocionar a nuestra gente. Y tras el baile, mi hermana Silvia se lanzó a por un micro y nos dejó boquiabiertos atreviéndose con la canción "All of me" de John Legend que llevaba meses y meses ensayando.
Después ya llegó el momento más distendido con la disco y la barra libre. Los invitados y nosotros nos hicimos miles de fotos en el super photocall de iniciales gigantes luminosas que nos prepararon Tamara y su familia. Hubo bailes, risas, amigos que lo dieron todo. Hasta las 7:30 de la mañana aguantamos los supervivientes. Los novios nos montamos en el último bus de invitados y el conductor nos dejó en el hotel.
Todavía se me ponen los pelos de punta al recordar el que fue, sin duda, el día más especial de mi vida. Así que espero que éste solo sea el principio de una nueva etapa maravillosa con el mejor marido del mundo.
Servicios y Profesionales de la Boda de Jesús y Laura




Otros Proveedores
Otras bodas en Madrid
Ver todas

Initium - Artigot Catering

Valquijancho de Araceli

Valquijancho de Araceli
Inspírate con estas bodas
Deja tu comentario